El Real Madrid va al asalto de El Pireo en una doble batalla que arranca este miércoles y que vivirá su segunda parte el próximo viernes en unos play off apasionantes en los que el equipo blanco pondrá a prueba al líder de la fase regular de la Euroliga, el Olympiacos. Los de Georgios Bartzokas reciben a su verdugo de las dos últimas temporadas en Europa, pero con una cara totalmente distinta a la de la pasada Final Four en Berlín.
El Real Madrid llegó a ese partido tras un 3-0 en la serie contra Baskonia y tras ser líder arrasando en la fase regular (27 victorias, tres más que el segundo, que fue el campeón Panathinaikos) y Olympiacos no tuvo prácticamente opciones al sufrir un primer cuarto arrollador de los de Chus Mateo (87-76 al final). El capitán madridista en esa semifinal era Rudy Fernández que, aunque ese día sólo jugase 5:32 minutos, tiene años y años de experiencias en este tipo de envites.
«En estas citas es donde resurge», apuntaba el legendario jugador del Real Madrid el pasado lunes en la alfombra roja de los Laureus, donde se encontraba OKDIARIO. Rudy Fernández tiene claro, al igual que hizo ver Chus Mateo tras la capital victoria contra el Bayern de Múnich en el play in, que al Olympiacos no le hizo ninguna gracia ese enfrentamiento contra su peor pesadilla.
«Todo es posible siendo el Real Madrid. Ojalá pueda dar ese zarpazo contra uno de los mejores equipos de Europa para estar en la Final Four», añadió el eterno capitán del conjunto blanco, que también opinó que durante su ganadora generación han «malacostumbrado a la gente de llegar siempre a las finales».
Rudy identifica al líder del Real Madrid
«Son temporadas muy largas, muy exigentes», comentaba Rudy. Razón no le falta, y es que sus antiguos compañeros junto a los nuevos refuerzos han tenido que atravesar un camino lleno de obstáculos para alcanzar el play off, una obligación para un club como el Real Madrid. Tras un inicio de temporada muy pobre, los de Chus Mateo se vieron forzados a afrontar cada jornada de Euroliga como una final, pero ni ganar seis choques seguidos al término de la fase regular les valió para asegurarse su lugar entre los seis primeros.
No les quedó otra que jugárselo todo al play in e incluso desaprovecharon la primera oportunidad en el Movistar Arena contra un París totalmente venido arriba. A vida o muerte ante el Bayern no fallaron y ya están a cinco victorias de ser campeones por duodécima vez, un reto complicadísimo especialmente en la serie frente a Olympiacos, que cuenta con un arsenal de estrellas liderado por Vezenkov y Fournier y que ya le ganó los dos partidos durante la temporada.
En cuanto a nombres propios, el Real Madrid también tiene sus amenazas en Facundo Campazzo, Walter Tavares y Mario Hezonja, al que Rudy Fernández todavía no acaba de ver como el líder de vestuario, sino a su eterno compañero y amigo Sergio Llull: «Es el veterano, es el capitán y al final es el que tiene todas las tablas para poder llevar al mejor equipo a lo máximo. Es cierto que si hablamos de estadísticas… Facu, Gaby (Deck), Musa son jugadores que son referentes. Siempre seguir al capitán es lo más importante y sobre todo en este tipo de torneos».