El Real Madrid de baloncesto arrolló al Zalgiris lituano (93-79) en esta tercera jornada de la Euroliga al ritmo de Facundo Campazzo, que realizó una espectacular conexión con Deck. El base argentino rozó el doble-doble con 18 puntos y nueve asistencias, las nueve a su compatriota y gran amigo. Poirier, que cumplía este martes 30 años, también estuvo brillante con otros 18 puntos.
El partido comenzó con los dos equipos muy trabados. Con poca efectividad y muchos errores en el tiro. Eso en los dos primeros minutos, donde solo se anotaron dos puntos entre los dos equipos. Pero después los jugadores entraron en calor y comenzó la acción. Ese inicio fue un espejismo ya que tanto el Real Madrid como Zalgiris empezaron cambiar sus dinámicas. Los blancos de la mano de, quién sino, Facundo Campazzo, que jugaba y hacía jugar a todos sus compañeros. El argentino, que comenzó con un altísimo nivel al que nadie podía seguirle, sumó 14 puntos en un primer cuarto que acabó con un resultado final de 25-19
En el segundo cuarto, el juego del Real Madrid denotó que su nivel estaba por encima del Zalgiris. Los de Chus Mateo mostraron una gran efectividad desde la línea de tiro y todo ello organizado bajo la batuta de Campazzo. El argentino seguía haciendo de las suyas y sus compañeros se nutrían de sus asistencias. El encuentro se fue al descanso con un 53-43 para el conjunto blanco gracias a un gran Poirier y Rudy Fernández.
Tras el descanso, el Real Madrid salió muy dormido. En los primeros minutos del tercer cuarto, los blancos desaprovecharon la ventaja de 10 puntos con la que se fueron al descanso. Mientras que no lograban sumar en el marcador, Zalgiris iba recortando poquito a poco con un gran trabajo de sus primeras espadas. Pasaban los minutos y los chicos de Chus Mateo no lograban espabilar, fue Deck el que se echó el equipo a las espaldas y logró desperezar a su equipo. La renta finalmente se mantuvo y el partido se fue al último cuarto con un 72-62 a favor de los blancos.
Apisonadora final
Pero el Real Madrid no quiso sorpresas y metió la marcha final para ser una auténtica apisonadora para Zalgiris. El conjunto blanco, en los primeros cinco minutos del último cuarto ya había metido más puntos que en el tercero. La realidad es que cuando los de Chus Mateo quisieron ganar lo hicieron sin apenas despeinarse. Poirier fue el jugador con más puntos del partido (18), mientras que Campazzo
Al descanso, el conjunto blanco proyectaba más de 100 puntos, como venía haciendo en los últimos encuentros. No lo consiguió finalmente y culpa de ello fue el mal tercer cuarto, pero no le hicieron falta llegar a la centena para arrasar a un Zalgiris que no tuvo opción en los 40 minutos de juego.