Javier Tebas, imputado por apropiación indebida y estafa en el ‘Caso Fuenlabrada’

• Francisco Rabadán @pacorabadan
• Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.
• • 23/03/2021 20:32
  • Actualizado: 18/09/2024 13:08

Javier Tebas ha sido imputado por el Juzgado de Instrucción número 6 de Fuenlabrada por un supuesto delito de apropiación indebida y otro de estafa en el caso que investiga la adquisición del club por parte de su actual presidente, Jonathan Praena. El presidente de la Liga acudirá a declarar ante la jueza María Dolores Nortes como cooperador necesario en una causa que podría verse ampliada a más delitos como administración desleal y asociación criminal. Las declaraciones, que inicialmente se iban a celebrar el 21 de enero, se vieron pospuestas por la tercera ola de la pandemia del coronavirus y ahora los querellados tendrán que testificar el próximo 8 de abril. 

La jueza investiga cómo el máximo mandatario de la Liga, a través de su despacho Tebas y Coiduras, dirigió la compra del Fuenlabrada poniendo en bandeja de plata la llegada de Jonathan Praena y su familia como máximos accionistas. Javier Tebas gestionó personalmente esa operación como quedó constatado en una serie de audios que OKDIARIO hizo públicos y en los que se podía oír cómo él y su hijo Javier Tebas Llanas daban las órdenes al presidente del Fuenlabrada para que se hiciese con la mayoría accionarial del club.

El presidente de la Liga, que cobró más de 100.000 euros por dirigir esta operación, facilitó las órdenes para orquestar la fórmula por la cual una sociedad propiedad de la familia Praena –ahora imputados padre, hijo e hija en la causa– compraría el 49% de las acciones del Fuenlabrada días antes de que este club ascendiese a Segunda División a un precio irrisorio.

En una reunión celebrada en diciembre de 2018, Tebas Jr, secretario no consejero del Fuenlabrada, preguntó en varias ocasiones a su padre sobre lo que Jonathan Praena debería hacer para quedarse con el club. «Para comprar el Fuenlabrada, Javier: ¿compramos con una sociedad ya constituida?», pregunta a la que Tebas padre responde afirmativamente delante de varios testigos.

«Y que se ponga a Jonathan de administrador y a su padre (Manuel Praena) de socio», le pregunta Tebas Jr a su progenitor, quien le sigue dando la autorización para la operación. Esta maniobra fue el preludio de la creación de la sociedad Esaesnu SL, que se hizo con el paquete de acciones del CF Fuenlabrada que era propiedad de Julian Pérez Escolar.

La sociedad se constituyó el 11 de enero de 2019, quedó inscrita en el registro mercantil el 11 de marzo de ese mismo año y el 30 de mayo, dos días antes del ascenso del club a Segunda División, ejecutó la compra de las acciones permitiendo a la familia Praena quedarse con el control del club tal y como había previsto Tebas: con Praena padre como propietario al 90% y Patricia, hermana de Jonathan, al 10%. A Jonathan Praena se le sacó de la sociedad por las diferentes causas judiciales que tenía y tiene abiertas y que podrían llevarle a condenas penales. Hay que recordar que dicha venta se produjo después de que el equipo madrileño venciese en el partido de ida de la eliminatoria por 3-0 al Recreativo de Huelva estando virtualmente ascendidos de categoría.

En la conversación que publicó OKDIARIO, se escucha hablar a Javier Tebas, presidente de la Liga, de forma muy rápida, aunque hay términos que se le entienden por el camino y que no dejan en muy buen lugar lo higiénico ni desde luego lo ético de sus planes. Palabras como «blanqueo de capitales», «Hacienda» o «registro» salen de la boca del presidente de la Liga, quien defiende que no tiene intereses en el club madrileño.

Tebas y su estrecha vinculación con el Fuenlabrada

Las pruebas, sin embargo, sitúan al presidente de la Liga como el hombre que todo lo sabe en el Fuenlabrada hasta el punto de aparecer en una serie de e-mails de planificación deportiva del equipo militando en Segunda División, algo que es un conflicto de intereses de libro y que está prohibido por el propio Código Ético de la Liga.

Javier Tebas ha salvado en multitud de ocasiones al equipo donde trabaja su hijo cobrando un gran salario –de seis cifras– por ejercer como secretario no consejero. El caso más sonado fue permitir al Fuenlabrada viajar a La Coruña en pleno brote de coronavirus en el seno de la plantilla del club ocasionando un brote en la capital gallega y adulterando el final de la pasada campaña en Segunda División.

Esa no ha sido la ayuda del presidente de la Liga para un equipo al que inscribió ilegalmente en la competición al estar en quiebra técnica cuando ascendió a Segunda y al que le ha dado alas al hacer la vista gorda en el límite salarial para hacer a este club más competitivo que al resto de su categoría.

Javier Tebas, que vende como apoyo implícito el silencio cómplice de unos clubes a los que tiene amordazados con dinero, se enfrenta a una imputación sin precedentes en el mundo del fútbol. El presidente de una Liga nacional está salpicado por estafar y ayudar a apropiarse indebidamente de un club que compone su competición.

En una competición de cualquier país serio y democrático, un caso así sería motivo de dimisión inmediata, pero el máximo dirigente de la Liga se aferrará al sillón sin que ninguna voz discrepante se atreva a cuestionarle. Hasta una querella de la Federación Española de Fútbol solicitando su inhabilitación por sus influencias en el Fuenlabrada y el Granada parece haber quedado en punto puerto por la inacción del CSD. Sólo la Justicia ordinaria cuenta con capacidad para poder plantar cara a un mandatario que se ha abonado a jugar en la fina línea de la imputación y el conflicto de intereses.