Frases geniales de Gregor Mendel

Gregor Mendel fue un científico nacido en Austria en 1822. Además, está considerado como uno de los grandes naturalistas de la historia humana. Es más, también fue religioso, perteneciendo a la orden católica de los monjes agustinos.

Las investigaciones de Mendel se centraron principalmente en las variedades de guisantes y arvejas. Gracias a su trabajo, formuló lo que se conoce como las leyes de Mendel, que rigen la herencia genética de las especies.

Es decir, que los primeros estudios y trabajos genéticos llevados a cabo en la historia humana fueron cosa de Mendel, que comenzó a realizar cruces entre especies durante el siglo XIX, y observando posteriormente los resultados, pues a veces encontraba diversos estilos, pero otras, veía las mismas formas.

En los resultados obtenidos, Gregor Mendel encontró que los caracteres dominantes eran los que se caracterizaban para determinar el efecto de un gen. Por su parte, los recesivos no tenían efecto genético en los fenotipos heterocigóticos.

El trabajo de Mendel fue muy valorado tras su publicación en 1866. De hecho, posteriormente hubo otros científicos que continuaron con su labor, y fueron ellos quienes, por separado, redescubrieron las leyes de Medel en el año 1900. Sus nombres eran Hugo de Vries, Carl Correns y Erich von Tschermak.

Por eso es tan interesante conocer cómo pensaba la mente de Mendel. Sin duda, una de las grandes inteligencias de nuestro mundo pasado tiene mucho que aportar a este presente.

Sabias frases de Gregor Mendel

• El valor y la utilidad de cualquier experimento se determinan por la aptitud del material para el propósito para el que se utiliza, y por lo tanto en el caso que nos ocupa no pueden ser inmaterial lo que las plantas son sometidas a experimento y de qué manera tal experimento se lleva a cabo
• Mis estudios científicos me han brindado una gran satisfacción, y estoy convencido de que no pasará mucho tiempo antes de que todo el mundo reconoce los resultados de mi trabajo
• Sólo si dos organismos o especies de la misma raza se unen, la descendencia de estos será de raza pura, y las diferencias entre padres y descendencia serán más leves
• Nada justifica la suposición de que la tendencia a formar variedades aumenta tan extraordinariamente que las especies pierden toda estabilidad, y su descendencia diverge en una serie interminable de formas extremadamente variadas

Ahora, como ya es habitual en nosotros, te invitamos a una profunda reflexión aprovechando las grandes enseñanzas de Gregor Mendel, uno de los grandes científicos de la historia de la humanidad.