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ARCA exige proteger la fachada de un edificio modernista de Son Espanyolet pendiente de demolición

La entidad conservacionista insta al Ayuntamiento de Palma a frenar su demolición

El edificio está ubicado en el número 3 de la calle Triana y su fachada cuenta con elementos propios del modernismo popular

La Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA) ha pedido proteger la fachada modernista de un edificio del barrio palmesano de Son Espanyolet. Se trata de un inmueble que tiene características del modernismo popular y cuya licencia de demolición está pendiente de validarse.

Dicha propuesta de protección se ha realizado en la reunión de la gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma. El regidor del área, Óscar Fidalgo, ha aceptado dejar la licencia sobre la mesa para estudiarla, según ha informado Arca en un comunicado.

El edificio está ubicado en el número 3 de la calle Triana y es de tipología tradicional. De hecho, en su fachada cuenta con elementos propios del modernismo popular, según explica la entidad conservacionista.

Motivos más que suficientes para que Arca solicite que, en vez de llevar a cabo su demolición, el Ayuntamiento de Palma estudie la posibilidad de que sus propietarios puedan agotar su edificabilidad, de modo que no sufran un perjuicio económico. Y es que según la asociación, el hecho de que el edificio cuente con dos entradas separadas, una en la calle Triana y otra en la de Contestí, facilita esta posibilidad.

Además, ARCA ha lamentado que en el caso de este edificio, se sumaría a la pérdida de inmuebles tradicionales de Son Espanyolet, donde se están sustituyendo por edificiaciones nuevas y «sin carácter».

Pese a que este martes Fidalgo ha aceptado su propuesta, la asociación ha recordado que en una reunión celebrada el pasado octubre para valorar la posible protección del inmueble hubo un empate técnico que se solventó con el voto del regidor, quien se opuso. En casos como este, en el que existan dudas, «lo más razonable es optar siempre por la protección», han defendido desde la Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA).