Reabren el ‘caso Eleazar’, el joven con discapacidad que murió tras ser reducido por 4 policías en Gijón

La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Gijón ha ordenado la reapertura del llamado caso Eleazar, el fallecimiento de un jóven de 30 años con una discapacidad psíquica tras ser reducido por cuatro policías locales durante un partido de la selección española. La orden de la juez llega tras recibir nuevos informes forenses e indicios de criminalidad en el caso recientemente archivado.

El nuevo estudio forense encargado por el letrado Marcos García Montes al despacho Balfagón-Chipirrás, concluye que la causa de la muerte del joven Eleazar fue de etiología «violenta y homicida» debido a una descompensación cardíaca.

El paro del corazón fue, según este nuevo estudio, provocado por la situación de asfixia debido a la presión sobre el torso de la víctima de los cuatro policías locales que estaban reduciendo a Eleazar. Una situación traumática potenciada por la posición boca abajo y esposado que soportó el joven durante largos minutos.

El tiempo excesivo que tardaron los vigilantes en dar crédito a la situación letal que vivía el joven y trasladarle a un centro médico, redundó según el perito en un mayor riesgo de muerte para el joven que terminó falleciendo.

Ahora, con nuevo informe, la juez da traslado a las partes y fija una ampliación de diligencias con la declaración por videoconferencia del forense autor del estudio. Será el próximo 24 de octubre y la juez advierte al fiscal para que esté presente durante la diligencia. La familia explica que esta «llamada de atención» no es casual: «El fiscal no ha estado presente en ningún momento y al final terminó pidiendo el archivo de la causa, el fiscal ha actuado en este caso como el mejor abogado de la defensa».

La jueza consideró probado en su día que Eleazar García, de etnia gitana, acudió al estadio de El Molinón en Gijón, el 8 de septiembre de 2019, para ver con su padre un partido de la Selección Española. En el descanso del partido, el joven salió del estadio para comprar un bocadillo y fue interceptado por los vigilantes de seguridad cuando intentó entrar de nuevo sin su entrada.

Eleazar, con una altura de 1’80 m y una discapacidad intelectual del 75%, intentó explicarse pero no tuvo la oportunidad. En medio de la discusión, el joven se alteró e intentó entrar a la carrera en el estadio y forcejeó con una vigilante de seguridad. Enseguida, varios vigilantes le inmovilizaron contra una valla y le esposaron.

Los policías locales de Gijón que llegaron al lugar delegaron en los vigilantes la reducción del joven y la colocación de las esposas sin detenerse ante los síntomas de angustia del joven discapacitado.

Más tarde, demasiado según la acusación,  trasladaron al Eleazar al centro de salud Parque Somió, donde le volvieron a inmovilizar cuatro policías situándose encima de su cabeza, del torso y de las piernas. La víctima quedó inconsciente y tras sufrir convulsiones entró en parada cardiaca, falleciendo esa misma noche.

El caso se archivó en 2021 después de que la Audiencia Provincial de Oviedo admitiera los recursos de los acusados. Ahora, la juez de Gijón vuelve a abrir el caso y la puerta a la familia de Eleazar en su afán de lograr justicia para el chico.