¡Salva y ayuda a la orca ibérica!

¡Salvad a la orca ibérica! No, no es una película a modo de ¡Liberad a Willy!, y sus secuelas, es un llamamiento real y cercano en clave conservacionista que ha lanzado la asociación WeWhale, radicada en distintos puntos de España, para ayudar a proteger a la orca ibérica, una especie en peligro crítico de extinción.

Willy y la orca ibérica tienen en común en que son historias muy reales y que son de la misma familia, Orcinus orca. Sin embargo, la orca ibérica es una gran desconocida que pertenece a una subpoblación diferente, muy pequeña, denominada Orcas del Estrecho de Gibraltar y Golfo de Cádiz, con unas características diferenciadoras.

En la actualidad hay controlada una pequeña comunidad estimada en aproximadamente 35 individuos, que vive, y convive, en el Estrecho de Gibraltar desde principios de abril hasta finales de octubre, una de las zonas de mayor paso de embarcaciones del mundo.

Situación crítica

Los cetáceos en general están protegidos en aguas españolas por la ley de protección de cetáceos, y, en concreto, la orca ibérica fue catalogada como vulnerable por el Ministerio para la Transición Ecológica en 2011 y está incorporada a la lista roja de UICN que la considera como amenazada y calificada como En Peligro Crítico en 2019.

Para huir de estereotipos hay que explicar que las orcas son cetáceos de la familia de los delfínidos, de hecho son los «delfines» más grandes. Ojo, no son ballenas (cetáceos con barbas), son odontocetos (cetáceos con dientes) y, desde luego, «no son asesinas», apuntan firmemente desde diversas fuentes científicas. ​

Su alimentación es principalmente el atún rojo del Atlántico, y, en concreto, esta subpoblación nunca come cetáceos u otros mamíferos marinos. De hecho, cazan su alimento hasta el agotamiento, y aprovechan la actividad pesquera de palangre para capturar comida sin esfuerzo.

Disparos y agresiones

Las orcas ibéricas se enfrentan «a numerosas amenazas como el tráfico marítimo, la contaminación y, cada vez más, las interacciones agresivas de los navegantes recreativos» indican desde la asociación.

Una especie que sale periódicamente en los titulares de prensa por sus interacciones con las embarcaciones o por disparos o lanzamiento de explosivos que reciben de los humanos en plena mar, que según los expertos son excepcionalmente esporádicos, pero que llaman la atención informativa y de la sociedad por estos sucesos.

Sin ir más lejos, en agosto de 2023, se observó y filmó a un equipo de un barco recreativo disparando a las orcas, mientras se acercaban a la embarcación en el Estrecho de Gibraltar.

WeWhale, junto con la World Cetacean Alliance y Sea Shepherd France, presentaron cargos contra el capitán y el propietario del barco. Este caso está actualmente en proceso en el sistema judicial español.

Campaña de donativos

Ante el fenómeno de extinción y de los problemas que acucian a la orca ibérica, WeWhale ha lanzado una campaña en la plataforma GoFundMe en la que los amantes de los animales pueden realizar donativos para ayudar a financiar un programa integral de vigilancia y protección, tanto en el mar como en tierra.

La iniciativa quiere, a través del crowdfunding, tener recursos para que un equipo en el mar patrulle cinco días a la semana, vigilando la población de orcas, evitando ataques de navegantes hacia las orcas y ayudando a evitar posibles interacciones entre barcos y orcas.

Además, con los recursos obtenidos, un equipo en tierra observará y hará monitoreo a la población de orcas desde lugares estratégicos en la costa. Según explica WeWhale, las donaciones recibidas «financiarán directamente equipos y recursos para los equipos de vigilancia».

Crear conciencia

Además, estos fondos contribuirán a la «investigación y análisis para comprender mejor el comportamiento e interacciones de las orcas, y esfuerzos de defensa para crear conciencia y hacer cumplir las protecciones para la orca ibérica».

El fundador de WeWhale, Janek Andre, declara estar encantado de «lanzar esta campaña de GoFundMe, con la visión de comenzar el programa de vigilancia y protección este abril. Con sólo 35 individuos restantes, la situación es grave para la orca ibérica»

Desde la asociación destacan «que se han reportado más de 500 interacciones entre la orca ibérica y los barcos entre 2020 y 2023, escalando hasta tal punto en el que los navegantes recreativos han comenzado a usar violencia, disparando a las orcas que se acercan».

Las interacciones continuas representan una amenaza significativa para la supervivencia de esta subpoblación clave, y el futuro de la orca ibérica pasa por conservarla y cuidarla de aquí al 2026, unos años que «son cruciales para garantizar su supervivencia».

Momento crucial

WeWhale destaca que «no podemos quedarnos de brazos cruzados y no hacer nada mientras esta población está cada vez más amenazada. El momento de actuar es ahora. Con su apoyo, podemos proteger y preservar la Orca Ibérica para las generaciones futuras».

La asociación WeWhale fue fundada en 2021 por el empresario Janek Andre con la misión de crear conciencia y protección para los cetáceos de nuestro mundo.

Sus proyectos descubren, exponen y persiguen los delitos contra la vida silvestre de ballenas y delfines, así como la sensibilización del público y las comunidades locales en las zonas donde las ballenas y los delfines desempeñan un papel vital en el ecosistema.

Trabajando a escala local, también actúan como embajadores y defensores de las ballenas y los delfines a escala mundial, sus lugares de trabajo se ubican en Cádiz, el Estrecho de Gibraltar, Lanzarote y Tenerife. Están presentes con un equipo in situ y embarcaciones propias en los tres lugares, concienciando sobre estos majestuosos animales y defendiendo sus derechos, pase lo que pase.