El primer robot biológico que elimina plásticos y enriquece los cultivos da sus primeros pasos
El dispositivo autónomo reduce el uso de plásticos, fomenta la biodiversidad, mejora la eficiencia operativa y la trazabilidad del manejo del suelo en sistemas ecológicos


El primer robot biológico autónomo enfocado a conseguir una agricultura más responsable y ecológica ya ha dado sus primeros paseos sobre el terreno, realizando pruebas reales y dando los resultados iniciales.
Hace unos meses ya dimos contamos los inicios de este proyecto español que pone en marcha un robot que va a cuidar los campos introduciendo soluciones tecnológicas avanzadas que combinan sostenibilidad y eficiencia.
Se trata del proyecto que ha desarrollado el grupo operativo BioterraBot. Robotización para el control de cubiertas vegetales en cultivos ecológicos que ha trabajado durante los últimos meses en la integración de robótica avanzada en el medio agrícola.
Reducción de residuos
El artefacto dotado de sensores y soluciones basadas en la naturaleza da respuesta a uno de los grandes retos del sector ecológico: reducir residuos sin comprometer la eficiencia agronómica.
Como parte del plan de transferencia de resultados, el grupo operativo ha presentado los resultados a agricultores y técnicos del sector en Lepe (Huelva).
Entre sus principales innovaciones, el GO BioterraBot ha puesto en marcha y ha validado un robot autónomo (AMR) equipado con un apero de siega de diseño propio, adaptado a condiciones reales de invernadero.
Un robot todoterreno
Según sus impulsores, «este robot ha demostrado su eficacia en la siega controlada de cubiertas vegetales tapizantes especialmente diseñadas para el cultivo de frutos rojos, garantizando la transitabilidad y funcionalidad, incluso en suelos húmedos o con vegetación densa».
Así mismo, el grupo operativo ha creado un repositorio digital de código abierto que contiene los elementos clave para el desarrollo y mejora de la navegación de robots segadores en entornos agrícolas controlados.
Estos recursos permiten a investigadores, desarrolladores y profesionales del sector probar y mejorar algoritmos sin necesidad de acceso físico al robot, gracias a los registros operativos (rosbags) y entornos simulados compartidos.
Bioterrabot, hacia una agricultura 5.0
Sus creadores aseguran que «la combinación de automatización, tecnologías IoT, inteligencia artificial y prácticas agroecológicas posiciona al GO Bioterrabot como un referente en la transición hacia una agricultura 5.0».
Añaden que «el modelo desarrollado no sólo reduce el uso de plásticos y fomenta la biodiversidad, sino que también mejora la eficiencia operativa y la trazabilidad del manejo del suelo en sistemas ecológicos.
El presidente de Ecovalia, Álvaro Barrera, ha destacado que «una vez más, la producción ecológica se enfoca en la sostenibilidad. Con este proyecto conseguimos eliminar el plástico sustituyéndolo por una cubierta vegetal con especies seleccionadas y mejorantes del suelo. Todo un avance tecnológico e innovador, una clara apuesta por la sostenibilidad».
Talento andaluz
Bella González Oria, directora de Organicultura, ha resaltado que «avanzar respetando los principios de la naturaleza, así como los objetivos económicos de la empresa agrícola, es posible», en referencia a la puesta en marcha del proyecto del robot biológico.
«Lo más satisfactorio de participar en proyectos de esta envergadura, ha sido compartir trabajo con talento andaluz: investigación, UCO; tecnología, Cetemec; referente y portavoz de lo ecológico, Ecovalia, investigación y conocimiento del entorno, Cantueso», destaca Gonzáles Oria.
La directora se ha mostrado muy satisfecha por el resultado que ha reunido talento con un objetivo común, «el de cultivar más sano». Destaca González Oria que «mantener el suelo vivo, e introducir un laboreo que no impacta el suelo y que reduce el consumo de carbono, la mano de obra, y la eliminación de plástico negro, es un camino que se puede y debe andar».
Reducción de residuos y biodiversidad
Por su parte, Gregorio Blanco Roldán, catedrático de la Universidad de Córdoba, ha subrayado sobre el robot biológico que «estas soluciones acercan la agricultura ecológica a los principios de la agricultura 5.0, combinando sostenibilidad y tecnología avanzada para mejorar el manejo del suelo, reducir residuos y reforzar la biodiversidad. Los avances obtenidos son prometedores y abren nuevas posibilidades de colaboración futura entre sector público y privado».
Su compañero, Rubén Sola, ha añadido que «la adaptación del robot y el desarrollo del apero electrificado enfocado a los requerimientos agronómicos que se demandaban en el proyecto ha supuesto un gran reto ingenieril multidisciplinar. Los resultados finales están siendo compartidos en repositorios digitales y revistas científico-técnicas para permitir seguir mejorando estos sistemas sin necesidad de acceso físico al equipo».
Aplicación en la nube
Además, Juan Pérez, investigador de Cetemec ha reseñado que «la aplicación en la nube que se ha diseñado es altamente polivalente y permite no sólo almacenar los datos del robot sino cualquier otro dato de la parcela u otro apero que se quiera monitorizar, ofreciendo un gran valor a agricultores para controlar el cultivo».
Por su parte, José Ángel Cantueso, gerente y fundador de Cantueso, ha señalado en la puesta en común de los resultados que «estamos muy satisfechos de haber participado en este proyecto de innovación medioambiental y tecnológico, que incorpora valor y diferenciación de producto, al cultivo de los frutos rojos en nuestra región, para hacerlo más sostenible y competitivo en el cada vez más exigente mercado nacional e internacional».
Solución pionera
Destaca de este robot biológico que se trata de una solución pionera en nuestro país, que «combina el uso de cubiertas vegetales tapizantes de plantas autóctonas, especialmente diseñadas por nuestra empresa, junto con el desarrollo tecnológico necesario para su adecuado control y posterior manejo, posibilitando la sostenibilidad del cultivo, a través de la eliminación del uso de los tradicionales plásticos».
El proyecto está cofinanciado con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) a través del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2014-2022, y la Junta de Andalucía en la convocatoria para el Funcionamiento de Grupos Operativos Regionales de la Asociación Europea de Innovación en Materia de Productividad y Sostenibilidad Agrícola (EIP AGRI) de 2022.