La Comunidad de Madrid estrena su primera parada de autobús de invierno con calefacción

Hacer la espera de autobús más cómoda y calentita en la parada, sobre todo cuando el frío invierno aprieta y estás a la intemperie, es una de las nuevas ideas que ha puesto en marcha la Comunidad de Madrid para añadir comodidad a la utilización del transporte público e incentivar su uso.

Para luchar contra el frío en las zonas más proclives a padecer las inclemencias del tiempo en la Comunidad de Madrid, el Consorcio Regional de Transportes ha estrenado en el municipio de Pedrezuela la primera parada de autobús con calefacción con el fin de mejorar la prestación de servicio al viajero durante el frío invierno.

Este proyecto piloto servirá para que los responsables del transporte valoren el funcionamiento de este prototipo en períodos de intenso frío, con el objetivo de extenderlo a otras poblaciones de la sierra el próximo año.

Solución innovadora

El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, ha visitado hoy la localidad para conocer este curioso dispositivo, «accesible y de alta eficiencia que evidencia nuestro compromiso por incorporar soluciones innovadoras en el transporte público madrileño, haciendo especial hincapié en las zonas rurales», ha destacado.

El sistema, desarrollado por la empresa Clear Channel, consiste en la colocación de un banco metálico que incorpora un termostato y un temporizador para que la calefacción se encienda y apague coincidiendo con el horario de servicio de las líneas.

Los responsables impulsores de las paradas de invierno con calefacción, explican que este dispositivo sólo se puede instalar en las marquesinas que tengan conexión eléctrica 24 horas. Además, añaden que toda la instalación cuenta con las protecciones necesarias para garantizar la seguridad de los pasajeros.

Materiales 100% reciclables

Actualmente, Pedrezuela dispone de 21 paradas de autobús que conectan el municipio con la capital y con varias poblaciones de los alrededores como son Buitrago del Lozoya, El Vellón o San Agustín de Guadalix.

El consejero ha recordado que las nuevas infraestructuras que se instalan en la región están fabricadas con materiales 100% reciclables e incorporan soluciones energéticas respetuosas con el medio ambiente.

Actualmente, sin contar con la ciudad de Madrid, existen 7.500 paradas, 4.200 postes y 3.500 marquesinas, de las que cinco son de montaña (Braojos, Cercedilla, dos en Santa María de la Alameda y la presentada hoy).

Más confort esperando al bus

Añadir comodidad y confort a las esperas en las paradas de autobús es uno de los objetivos de los gestores del transporte público. Una de las mayores incomodidades es el tener que sufrir las temperaturas, además del viento o la lluvia.

En este sentido, el Ayuntamiento de Madrid instaló en julio de 2024 otro sistema, esta vez para todo lo contrario, luchar contra el calor. Esperar el autobús en Madrid en plena canícula ya es menos traumático tras la instalación de nuevas marquesinas refrescantes en el inicio del verano de 2024.

La nueva medida, que puso en marcha por la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT Madrid), formó parte de un proyecto piloto que ya funciona en dos puntos de la capital de España.

Paradas con aire acondicionado

Las nuevas marquesinas tenían entonces un mensaje original en el que se podía leer «Vaya, vaya… No tendremos playa, pero, ¿quién tiene la primera marquesina que da fresquito?».

Los viajeros que disfrutaron de este sistema el pasado verano eran los usuarios de estas marquesinas refrescantes ubicadas en las áreas intermodales de Pavones y Villaverde Cruce. Estas paradas, con frío, representaban la primera vez que se instalaban en la calle un prototipo de estas características, capaces de ofrecer un sistema de refrigeración para los viajeros mientras esperan el bus.

Las nuevas marquesinas refrescantes, también desarrolladas y patentadas por JCDecaux, cuentan con un botón situado en su interior que, a partir de los 25 °C, pone en marcha un sistema de enfriamiento por evaporación y ventilación.

Según el consistorio madrileño, «el sistema es capaz de reducir significativamente la temperatura ambiente en la marquesina hasta en 9 °C según la temperatura exterior».