Ayuntamiento de Madrid

El Ayuntamiento de Madrid suspende la prohibición y la retirada de los 6.000 patinetes de alquiler

La empresa Lime ha recibido una notificación del consistorio comunicando la suspensión temporal hasta que un juzgado resuelva la situación

El Ayuntamiento de Madrid ha retirado 250 patinetes de las calles de la capital desde el pasado 25 de octubre

Ayuntamiento Madrid patinetes
Antonio Quilis Sanz
  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

El Ayuntamiento de Madrid ha dado marcha atrás en su decisión de seguir  retirando los 6.000 patinetes de alquiler que operan en la ciudad a través de las compañías, Lime, Tier y Dott, es decir, paraliza el sacarlos de las calles y permite que sigan estando estacionados en ellas.

Así lo confirma a OKGREEN la empresa Lime, que ha informado que «el Ayuntamiento de Madrid ha acordado suspender temporalmente la ejecución del decreto de revocación de las autorizaciones demaniales del servicio de patinetes eléctricos compartidos en favor de las empresas hasta que el juzgado resuelva sobre las medidas cautelares solicitadas».

250 patinetes retirados

Según fuentes del Área de Movilidad, desde el pasado 25 de octubre, el Ayuntamiento de Madrid ha retirado 250 patinetes de las calles de la capital, una actuación que conlleva unos 60 euros de coste por su transporte al depósito y una multa de 1.500 euros por mantener los vehículos en las calles tras su prohibición.

De esta manera, el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida ha comunicado a Lime que procede «a paralizar la retirada de los patinetes de Lime de las calles de la ciudad, como la compañía le había solicitado, con fundamento en la consolidada doctrina de nuestro Tribunal Supremo y Tribunal Constitucional al respecto», según destaca la compañía.

Dott Lime
Hemos podido comprobar que los patinetes siguen disponibles en las calles de Madrid. En la foto, patinetes de las compañías Dott y Lime cerca del intercambiador de Moncloa.

Seguirán circulando

Por ello, Lime «celebra» esta decisión de paralizar la retirada de patinetes compartidos de las calles y de suspender la decisión de que no siguieran operando en Madrid, por lo que estos vehículos de movilidad compartida seguirán circulando y prestando servicio.

En concreto, la compañía explica que «tras el fin del plazo establecido por el Ayuntamiento de Madrid para la retirada de los patinetes eléctricos y el prematuro inicio de la retirada de los vehículos por parte del Consistorio el pasado fin de semana, la compañía no se ha rendido hasta conseguir que el consistorio reconozca formalmente que no procede la retirada de sus patinetes de las calles de Madrid hasta que, en su caso, el juez competente así lo determine al resolver la medida cautelar solicitada».

Lime reitera que «su operativa se ha estado llevando a cabo en cumplimiento estricto de la legalidad durante todo el proceso de revocación, iniciado el pasado mes de septiembre».

Las otras dos operadoras, Tier y Dott han mostrado su satisfacción «con la decisión del Ayuntamiento de Madrid de suspender el acto de revocación de las autorizaciones de los patinetes eléctricos compartidos».

También explican que «gracias a esta suspensión el servicio de patinetes eléctricos compartidos, fundamental para reducir la congestión y la contaminación, continuará  siendo accesible para los ciudadanos de Madrid mientras continúa el proceso legal. Cabe destacar que  una primera suspensión en el marco de una medida cautelarísima fue dictada el 17 de octubre».

Decisión unilateral

Añaden que el «Ayuntamiento de Madrid tomó la decisión unilateral y prematura de iniciar la retirada de patinetes, a pesar del procedimiento de medidas cautelares pendiente de resolución por el juzgado, y la compañía ha conseguido ahora paralizar esa decisión amparándose en la legalidad y doctrina constitucional vigentes».

Así mismo, la operadora que tiene 2.000 patinetes en Madrid cree que «esta decisión beneficia a todos los ciudadanos de Madrid, que podrán seguir utilizando un medio de transporte sostenible y seguro».

Tier y Dott, que operan los otros 4.000 vehículos, mantienen que «la decisión de detener los servicios de patinetes eléctricos compartidos no sólo es injusta, sino que fue alcanzada de forma apresurada, sin justificar adecuadamente las razones de la revocación. Por ejemplo, una de las preocupaciones planteadas por la ciudad de Madrid se refería a la cobertura de seguro que posteriormente fue retirada, lo que resalta una importante omisión por su parte».

6.000 patinetes

En defensa de la movilidad

Lime asegura que continuará defendiendo el derecho de los madrileños a una movilidad sostenible en el marco de la legalidad, en consonancia con los compromisos asumidos para el periodo de vigencia de las autorizaciones otorgadas por el ayuntamiento el año pasado, así como colaborando activamente con las autoridades municipales para seguir apostando por la conectividad sostenible en las ciudades.

Además, la compañía expresa que «lamenta profundamente que el Ayuntamiento no haya tenido en consideración la visión de las empresas operadoras en ningún momento en este proceso de decisión, ni tampoco de la ciudadanía que usa estos patinetes».

Así mismo, Lime «reitera que su operativa se ha realizado acorde a los requisitos de la autorización acordada inicialmente con el consistorio».

Madrid seguirá sancionando

Desde el Área de Movilidad que dirige el concejal delegado Borja Carabante, responden escuetamente que «la empresa de patinetes Lime ha solicitado medidas cautelares frente a la retirada de patinetes de las calles de Madrid».

Además, añaden que «hasta que el juez se pronuncie (en los próximos días), el Ayuntamiento de Madrid paraliza desde hoy la retirada de patinetes de la ciudad». Sin embargo, aseguran que el «ayuntamiento continuará sancionando por estacionamiento indebido», es decir, aquellos vehículos compartidos que no estén en las zonas habilitadas para dejarlos.