«Soy profesor de autoescuela y éste es el truco infalible para aparcar en batería a la primera»

El no tener demasiada práctica al aparcar puede provocar que los conductores vayan a perder algunas habilidades, en especial cuanto más tiempo pasen. Por este motivo, es habitual ver a muchos conductores con problemas para el estacionamiento del coche.

¿Cómo aparco en batería?

Vamos a ver qué referencia hay para el estacionamiento a la primera. Respecto a este tema, la DGT lo que hizo fue publicar hace unos años un vídeo en la Revista Tráfico y Seguridad Vial como guía para los que deseen ir refrescando una serie de conceptos, referencias o consejos, con los que se puede aparcar en batería con total satisfacción.

En ese vídeo, el organismo de Tráfico nos recuerda «cómo hacer el aparcamiento perfecto en base a siete pasos»:

• Señalizar la maniobra con antelación para poder evitar retenciones.
• Alinear los parachoques con el vehículo aparcado con una separación lateral de cerca de medio metro.
• Retroceder, girando todo el volante hacia el lado en que se estacione.
• Comprobar por el espejo derecho que no haya peatones ni obstáculos.
• Cuando la rueda trasera pase a rebasar el faro del coche estacionado no lo va a rozar ya.
• Ahora toca mirar por el espejo izquierdo y continúa retrocediendo.
• En el caso de que sea necesario, solo hay que dar marcha adelante para centrar el vehículo.
• Inmovilizar el vehículo con el freno de mano.

Las claves para saber a aparcar en cualquier sitio

Te vamos a contar un poco más lo que debes tener en mente:

Aparcamiento oblicuo

Si se quiere un buen aparcamiento en diagonal que sea perfecto y que esté e la distancia suficiente de los dos coches para que no se golpeen al abrir las puertas, de tal forma que haya metro y medio o dos de separación entre el coche y otro estacionado.

Cuando no haya ningún otro vehículo que esté aparcado en las plazas próximas, calcula esa distancia desde el punto que el frontal se alinee con la esquina. Todo ello para que se asegure que no le vas a dar al girar las ruedas.

Siempre hay que poner el intermitente que se haya encontrado una plaza de parking, ya que no va a costar nada estirando el dedo corazón.

De esta forma los conductores van a saber que estacionarás en vez de imaginarlo. Luego avanza hacia delante lentamente hasta que veas el centro del hueco, mientras sigues atento al resto de los conductores. No tienes que coger una plaza que alguien se encuentre esperando y darte cuenta de que al lado no va a estar dando marcha atrás al mismo tiempo que intentas meter tu vehículo.

Girar el volante hacia el tope, pero nunca totalmente detenido, siempre con las ruedas moviéndose, por lento que sea. En cuanto veas el centro del sitio tuyo, comprueba de nuevo que sigue ese margen de seguridad que tiene una medida de un par de metros.

Ahí es cuando giras el volante hacia el otro lado, cerca de media vuelta. Sin prisas endereza las ruedas, progresivamente y para. No te olvides de mirar si se puede aparcar este sitio y que se ponga el freno de mano.

Consejos para aprender a aparcar

El principal que podemos dar es practicar mucho, ya que muchos saben hacerlo, pero hay otras personas que comienzan a evitarlo desde que reciben el carné. No tengas miedo en que otro conductor con experiencia te acompañe mientras practiques los diferentes aparcamientos.

Ajusta los espejos retrovisores, puesto que aunque algunas personas piensan que tienen que estar ahí para que los demás puedan ver el reflejo de lo atractivos que somos, es algo de lo más útil.

Con una buena postura de conducción, vas a ver solo el borde del paso de rueda trasero al girar levemente la cabeza.  Inclinando sutilmente hacia abajo, vas a poder ver las marcas de la carretera o las líneas del espacio de aparcamiento.

El último ajuste hay que hacerlo solo si va a ser seguro y no olvides que hay que ver el suelo, sino los coches que van a venir por detrás.

Hay que evitar que se produzcan los movimientos bruscos, tanto en la dirección como en los clásicos pisotones en los pedales.

Aunque pueda parecer algo lógico, cuando uno se encuentre a la mitad de una maniobra y se dé cuenta de que se desvió un poco o que no le cuadra, se puede motivar con los pedales y la dirección.

No olvides que hay muchas diferentes situaciones en los aparcamientos que los conductores deben saber. Existen pautas simples sobre en qué momento girar y qué hay que recordar al estacionar todo lo que se necesite para que se perfeccionen las habilidades.

Es algo a lo que no hay que tener miedo. Cuando se hace todo con cabeza y paciencia, es posible aparcar casi en cualquier lugar, siempre que haya hueco para el coche, claro está.