Conducir Trucos

En España cada vez más gente está cubriendo los retrovisores con bolsas de plástico y funciona

Bolsas de plástico en los retrovisores

A primera vista, la imagen de un coche con los retrovisores cubiertos de bolsas de plástico puede resultar curiosa. Sin embargo, detrás de este gesto aparentemente trivial se esconden motivos prácticos y bien fundamentados para mantener el coche en buen estado y evitar daños. Ahora que llega el invierno, conviene saber que uno de los usos más extendidos es la protección contra el hielo y la escarcha.

En zonas donde las temperaturas nocturnas caen por debajo de cero, los retrovisores se convierten en uno de los puntos más vulnerables del vehículo. El agua que se deposita sobre ellos se puede congelar rápidamente, bloqueando los mecanismos de plegado y dañando los cristales o la carcasa del espejo. En este contexto, cubrir los retrovisores con bolsas de plástico impide que se forme una capa de hielo.

¿Por qué los conductores están cubriendo los retrovisores con bolsas de plástico?

Otro enemigo frecuente de los retrovisores y del resto de la carrocería de un vehículo son los excrementos y los picotazos de las aves. En particular, los excrementos contienen ácidos que atacan el barniz y la pintura, provocando manchas difíciles de eliminar si no se actúa de inmediato. Sin embargo, se trata de un problema que tiene fácil solución, ya que basta con cubrir los espejos con bolsas de plástico.

Sin embargo, lo más curioso e inesperado de esta práctica tiene que ver con el comportamiento territorial de algunas especies de aves durante la temporada de apareamiento. Los gorriones, mirlos, pinzones, herrerillos y algunos córvidos pueden atacar repetidamente su propia imagen en los retrovisores de los coches estacionados, lanzando picotazos y aleteos. Aunque para el ave es un comportamiento instintivo, para los conductores puede traducirse en daños visibles en el espejo, como arañazos o abolladuras.

Para proteger el coche de estos ataques, los conductores sólo tienen que cubrir los espejos con bolsas de plástico o fundas específicas, que eliminan el reflejo que perciben las aves y, por ende, reducen la posibilidad de que el pájaro interprete el espejo como una amenaza.

Guía paso a paso

Cubrir los retrovisores del coche con bolsas de plástico o fundas específicas es una solución sencilla, económica y eficaz para protegerlos. A continuación, te explicamos cómo hacerlo paso a paso:

  1. Lo primero es seleccionar un material resistente y lo suficientemente grande para cubrir por completo el retrovisor. Puedes usar bolsas de plástico grueso de supermercado, bolsas de basura pequeñas, o fundas diseñadas específicamente para retrovisores.
  2. Antes de colocar la bolsa, limpia la superficie del retrovisor y sécala. Esto evita que la bolsa se pegue a la suciedad o al agua y permite que quede bien ajustada.
  3. Introduce el retrovisor dentro de la bolsa o funda, asegurándote de que quede completamente cubierto, incluyendo la parte inferior y los laterales.
  4. Una vez colocada, ajusta la bolsa para que quede lo más ceñida posible al espejo. Usa cinta adhesiva resistente, pinzas o incluso un nudo en la parte inferior para evitar que el viento se la lleve.

La limpieza es clave

Los retrovisores son elementos esenciales para la seguridad vial, ya que permiten tener visibilidad lateral y trasera mientras se conduce. Por ello, mantenerlos limpios y en buen estado no sólo es cuestión de estética, sino también de seguridad.

  1. Para limpiar los retrovisores, necesitarás algunos elementos básicos: un paño de microfibra limpio, agua, jabón neutro o limpiacristales, y, opcionalmente, un spray anti-vaho si deseas prevenir la condensación. Evita usar productos abrasivos o estropajos, ya que pueden rayar la superficie del espejo.
  2. Si el retrovisor tiene polvo, barro o suciedad acumulada, enjuágalo primero con agua corriente.
  3. Aplica un poco de jabón neutro diluido en agua o un limpiacristales específico y frota suavemente la superficie con movimientos circulares.
  4. Si hay restos de insectos o excrementos de aves, utiliza un paño húmedo con agua tibia y jabón neutro. Deja actuar unos segundos sobre la zona antes de frotar para ablandar los residuos secos.
  5. Luego, seca el retrovisor con un paño de microfibra limpio y seco. Evita dejar gotas de agua, ya que pueden formar marcas y afectar la visibilidad. Los movimientos deben ser suaves y en dirección horizontal o vertical, nunca en círculos.
  6. Para limpiar la carcasa del retrovisor, Utiliza un paño húmedo y un poco de jabón para limpiar la parte exterior, y un cepillo de cerdas suaves para acceder a las rendijas y uniones.
  7. Después de la limpieza, revisa que no queden rayas ni residuos que puedan dificultar la visibilidad. Ajusta el retrovisor para asegurarte de que está en la posición correcta desde todos los ángulos.

«Ajustados asiento y volante, es turno de los retrovisores. Deben estar colocados de forma que ofrezcan una visión correcta de la vía sin tener que mover la cabeza. El retrovisor interior debe estar centrado en la luneta trasera. Los laterales, abiertos para cubrir un mayor ángulo, hasta dejar de ver el lateral del vehículo», recuerda la DGT.

Lo más visto

Últimas noticias