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3 exfoliantes caseros para la piel seca

La piel seca es muy delicada y requiere muchos cuidados

exfoliantes caseros
La piel seca es muy delicada y requiere muchos cuidados

La piel seca es uno de los tipos de pieles que más cuidados requieren, ya que debe mantenerse siempre hidratada para estar saludable y verse bonita y reluciente. Te mostramos algunos exfoliantes caseros para piel seca que le sentarán genial y la hidratarán al instante para dejarla tersa, suave y luminosa.

La piel seca hace que la piel se vea escamada y apagada, pero por suerte hay numerosos productos que puedes utilizar para mejorar su estado, tanto comprados como elaborados por ti misma en casa.

Exfoliantes caseros para piel seca que merece la pena probar

Exfoliante de café y azúcar

Para prepararlo necesitas ¼ taza de azúcar granulado, ¼ taza de café molido, 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y 3 cápsulas de vitamina E. Mezcla todos los ingredientes hasta conseguir una pasta homogénea. Date una ducha con un jabón natural y, tras aclararlo, reparte el exfoliante corporal con los dedos mediante movimientos circulares y masajeando durante unos minutos. Deja que actúe 10 minutos y aclara con agua tibia. Puedes repetir este tratamiento dos veces por semana.

Sales de baño de lavanda

Este exfoliante lo puedes preparar con una taza de sal marina (triturada si los granos son grandes), media taza de aceite de oliva y una cucharada de aceite esencial de lavanda. Mezcla bien todos los ingredientes y aplica sobre la piel limpia, masajeando durante 3-4 minutos, con movimientos suaves y circulares. Si tienes alguna herida, no lo apliques en ella. Aclara después con agua tibia y aplica tu crema hidratante habitual. Puedes utilizar este exfoliante una vez por semana.

Exfoliante de aceite de coco

Para preparar el último de nuestros exfoliantes caseros para la piel seca necesitas media taza de azúcar granulado y media taza de aceite de coco. Mezcla los dos ingredientes hasta obtener una pasta homogénea y guarda en un frasco de cristal con tapa. Date una ducha y, después de aclarar el jabón, aplica el exfoliante mediante un masaje suave. Enjuaga con agua tibia.

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