Meghan Markle SÍ seguirá esta tradición
Si hay algo que ha caracterizado a Meghan Markle desde que el príncipe Harry anunció su compromiso con ella es que ha marcado su propio estilo, en todos los aspectos. La norteamericana no solo ha desafiado el estricto protocolo de la Corte británica en numerosas ocasiones, sino que además se ha atrevido incluso a manifestar sus propias opiniones y a posicionarse a favor de determinadas cuestiones sociopolíticas.
Meghan Markle / Gtres
Es cierto que aún no se ha casado con el nieto de la Reina y que quizás por eso se le permiten ciertas licencias que es muy probable que una vez se convierta en duquesa de Sussex tenga que comportarse de una manera más ‘acorde’ con su posición, pero por ahora goza de cierta libertad.
Kate Middleton y el príncipe Guillermo en su boda / Gtres
Se como fuere, la exactriz ha hecho y deshecho casi a su antojo. Ha acudido a actos casi ‘despeinada’, ha firmado autógrafos como si aún fuera una celebrity, ha dicho que quería que su madre fuera quien la acompañase hasta el altar y hasta ha asegurado que le gustaría dar un discurso el día de la boda. Por si esto no fuera suficiente, Harry y ella se casarán un sábado, rompiendo con la norma no escrita que marca que las bodas reales nunca han de celebrarse en fin de semana.
Lingote de oro / Gtres
Pese a todo, hay una tradición que Meghan sí va seguir, aunque se desconoce si lo hace por voluntad propia o porque se le ha impuesto así. Según confirman varios medios, la prometida del príncipe Harry llevará una alianza elaborada con oro galés. Una tradición que se remonta a 1923, cuando se celebró la boda entre Elizabeth Bowes Lyon, Reina Madre, cuyos pasos siguió Isabel II y el resto de damas de la Familia Windsor, incluida Kate Middleton.
Ben Roberts, director de la empresa Clogau, que se encarga de suministrar el oro para las alianzas de los Windsor y cuenta con dos minas propias en la zona norte de Gales, ha explicado al diario Express que la de Meghan será muy especial, ya que se intentará que la tonalidad del oro sea lo más parecida posible al de su anillo de compromiso, que es de un amarillo muy brillante.
Aunque el oro galés tiende al rosa, no hay ningún tipo de inconveniente para conseguir el tono que se desee. Además, el de Meghan, que será elaborado por la prestigiosa joyería Wartski tendrá un dragón galés grabado.