Irene de Grecia, la princesa que renunció a sus orígenes y vive en Zarzuela con pasaporte español
La tía del Rey Felipe VI lleva en el Palacio de Zarzuela desde la década de los 80
Es un pilar fundamental en la vida de la Reina Sofía

Irene de Grecia cumple este 11 de mayo 83 años. La hermana de la Reina Sofía lleva muchos años instalada en España y es una de las personas más cercanas a la madre de Felipe VI, su inseparable apoyo, sobre todo desde que falleció el rey Constantino de Grecia.
A pesar de que durante mucho tiempo ha sido prácticamente la sombra de la Reina Sofía en numerosas citas -sobre todo en las relacionadas con el mundo de la música-, de un tiempo a esta parte su presencia en actos oficiales se ha reducido debido a su estado de salud. Hace ya varias semanas que no la vemos acompañando a doña Sofía en sus compromisos institucionales, aunque sí que ha trascendido que ambas siguen haciendo planes juntas. Por ejemplo, a finales del mes de marzo, cuando las dos estuvieron en un recital en el Auditorio Nacional de Música. También sigue participando en celebraciones familiares y privadas, como la boda del príncipe Nicolás en Atenas en febrero o a la de Teodora en septiembre de 2024.
Es uno de los miembros más discretos de la familia del Rey Felipe VI, siempre sin querer llamar la atención y continuamente en segundo plano. Tanto el monarca como sus hermanas tienen un gran cariño por la hermana de su madre, a la que llaman en la intimidad tía Pecu, por su peculiar personalidad.
La Reina Sofía con Irene de Grecia. (Foto: Gtres)
Irene ha sido siempre uno de los mayores apoyos de la Reina Sofía, su confidente y persona de más confianza. Forma parte, junto con el matrimonio Fruchaud, del círculo íntimo de la madre del Rey Felipe VI. Esas personas que están siempre cuando las necesita. La realidad es que la Reina Sofía nunca ha tenido muchas amigas a las que confiar sus secretos o hablar de sus preocupaciones.
Nacida en Sudáfrica en 1942, la vida de la princesa Irene ha estado marcada por los diferentes acontecimientos que han condicionado el devenir de su familia. Su llegada al mundo se produjo en el exilio y desde pequeña mostró su interés por la naturaleza, la arqueología y la música. De hecho, llegó a ser una virtuosa del piano y tocó frente a los Windsor en el Royal Albert Hall en 1969.


Irene de Grecia, en las inmediaciones de la clínica Ruber de Madrid. (Foto: Gtres)
Aunque pudo pasar unos años de su juventud en Grecia, el Golpe de los Coroneles en 1967 supuso el fin de la monarquía en el país. La familia se instaló en Roma, pero poco después Irene viajó con su madre a Madrás, en la India. Allí cultivó su pasión por la cultura hindú y su espiritualidad, incluso estudió en la Universidad de Madrás. Su estancia en la India fue muy importante para ella y marcó sus pasos a partir de ese momento. De hecho, ella misma le confesó a la periodista Eva Celada que había sido uno de los mejores viajes de su vida. La Reina Sofía la visitó varias veces, incluso con sus hijos.
Una princesa griega en Madrid
Irene de Grecia se instaló en el Palacio de la Zarzuela en 1981 tras la repentina muerte de su madre, la reina Federica de Grecia después de una intervención quirúrgica.
Tras varios años residiendo en nuestro país, la princesa recibió la nacionalidad española por carta de naturaleza en marzo de 2018. La carta de naturaleza es una fórmula especial que se aprueba mediante real decreto, cuando se considera que hay una serie de circunstancias especiales para que se otorgue. En el caso de Irene hay que tener presente que el gobierno de Grecia le había retirado su nacionalidad.


Doña Sofía y su hermana Irene de Grecia (Foto: Gtres)
Una royal soltera
La tía de Felipe VI nunca se casó, aunque sí que hubo rumores de algunas relaciones. Se comentó que mantuvo un romance con un hombre griego casado e incluso que su madre quiso casarla con Harald de Noruega, algo que no ocurrió. Irene estuvo enamorada de su primo Mauricio de Hesse, hijo de Felipe de Hesse-Kassel y la princesa Mafalda de Saboya cuando era joven, pero él se casó con la princesa Tatiana de Sayn-Wittgenstein-Berleburg. También estuvo a punto de casarse con el príncipe Miguel de Orléans, conde de Évreux, que finalmente se casó con Beatriz de Orleans.
A Irene nunca le ha gustado hablar de sus relaciones amorosas porque, según le explicó a la periodista Eva Celada, eso implica a terceras personas. Se cuenta también que hubo un intento de romance con Gonzalo de Borbón, pero el Rey Juan Carlos se opuso. «Si sigues adelante con mi cuñada, te expulsaré de España», le dijo según Pilar Eyre. También el padre de Felipe VI cortó cualquier posibilidad de relación con Jesús Aguirre. Todo esto hizo que Irene se volcara en su trabajo solidario, sobre todo, en la organización Mundo en Armonía.


Irene de Grecia en la década de los años 60. (Foto: Gtres)
La salud de Irene de Grecia
A lo largo de los últimos años, la hermana de la Reina Sofía ha tenido algunos problemas de salud, más allá de los que padece en estos momentos y que, como no es miembro de la Familia Real, pertenecen a su vida privada. En 2002 trascendió que se le diagnosticó un cáncer de mama por el que se sometió a una serie de sesiones de quimioterapia. Retomó su vida normal sin mayores complicaciones.


La Reina Sofía con la infanta Cristina e Irene. (Foto: Gtres)
Sin embargo, cuando se la vio en silla de ruedas en Mallorca aumentó la preocupación sobre su salud. Desde la Casa Real nunca se han dado detalles sobre la situación de la princesa, pero sí que se sabe que la Reina Sofía y otros miembros de su familia están muy pendientes de ella.