Haya de Jordania 20 años después de su boda: el discreto presente de la princesa ‘fugada’

El año 2024 es un año de grandes aniversarios en la esfera de la realeza. Se cumplen 20 años de la boda de don Felipe y doña Letizia, así como del enlace de los nuevos reyes de Dinamarca. Dos historias de amor de parejas que aún siguen juntas, aunque este año, también habrían cumplido 20 años de casados la princesa Haya de Jordania y el emir de Dubái. Su matrimonio terminó con una royal a la fuga y el divorcio más caro de la historia de la monarquía.

Fue el 10 de abril de 2004 cuando la pareja contrajo matrimonio en el palacio de Al-Baraka, en Amán, en una ceremonia íntima a la que asistieron únicamente sus familiares más cercanos. No fue una gran celebración, sino más bien todo lo contrario. La hermana del actual rey de Jordania, Abdalá, se convirtió en la sexta esposa del emir, y deslumbró con un precioso vestido blanco con bordados y un velo de tul. A la ceremonia asistieron Rania y Abdalá de Jordania, así como la madre del rey, la princesa Muna. En aquel momento, nadie pensaba que el matrimonio acabaría en divorcio, ya que tanto Haya como el emir se mostraron radiantes.

Desesperada huída a Reino Unido

Quince años después, en mayo de 2019, la princesa Haya huyó de Dubái, aparentemente temiendo por su vida y por la estabilidad de sus hijos, después de que su marido hubiera tenido constancia de la cercanía que la princesa tenía con su guardaespaldas británico, Russell Flowers (por cierto, gracias a la entonces mujer del guardaespaldas). Más tarde, se supo que, en realidad, mantenía una relación con él, y le agasajaba con todo tipo de lujos y regalos. Además, la princesa le pagó una importante suma para que guardara silencio sobre su relación.

La hermana del rey Abdalá consiguió escapar de Emiratos Árabes y refugiarse en Londres, donde comenzó uno de los procesos de divorcio más complicados y mediáticos de los últimos tiempos. La princesa fichó a la prestigiosa abogada Fiona Shackleton, conocida como la ‘Magnolia de acero’, responsable de haber llevado casos como el de los anteriores príncipes de Gales, Carlos y Diana.

Un divorcio mediático

El acuerdo de divorcio se saldó con un pago de más de 600 millones de euros por parte del emir. En cuanto a la custodia, que se resolvió meses más tarde, le fue concedida, en exclusiva, a la princesa Haya de Jordania. La hermana del rey Abdalá es la responsable de la educación y los cuidados de sus hijos, mientras que su ex marido solamente puede tener contacto telefónico con ellos. Asimismo, el emir tiene que abonar los gastos correspondientes a la seguridad de su ex mujer y sus hijos.

Un juez del Tribunal Supremo británico dijo, además, que el juicio había sido como una ‘campaña de miedo, acoso e intimidación’ hacia la hermana del rey Abdalá, que se instaló en la zona de Gales.

La princesa cuenta en Reino Unido con el apoyo y la protección de su familia, de hecho, el rey Abdalá la nombró jefa adjunta de la misión de la embajada jordana en Reino Unido, un cargo que le permite a la princesa tener inmunidad diplomática, así como protección. Además, también dirige la ONG Tkiyet Um Ali (Comida para la Vida), y sigue ostentando el título de Mensajera por la Paz de las Naciones Unidas.

Haya de Jordania, un perfil discreto

En la actualidad, la princesa prefiere mantener un perfil bajo, alejada de los focos. No obstante, en ocasiones puntuales alza la voz a través de las redes sociales. La última, ha sido hace apenas unos días, para pedir el alto el fuego en Gaza, algo que comparte con la reina Rania de Jordania.

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Una publicación compartida de Haya Bint Al Hussein (@hrhprincesshaya)

La princesa no publicó un mensaje propio, sino que apostó por compartir un mensaje del secretario general de la ONU, António Guterres, en el que se anunciaba la aprobación de una resolución en la que se exigía un alto el fuego «inmediato y la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes».

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Una de las últimas veces que la princesa publicó algo más personal en las redes fue hace ya varios meses, cuando aprovechó para felicitar públicamente al príncipe Hussein y a la princesa Rajwa por su enlace: «Os deseo a ambos una vida feliz juntos llena de buena salud, alegría y paz», escribió Haya de Jordania. Antes de su mediático divorcio, la hermana del rey Abdalá era mucho más activa en las redes, donde solía publicar contenido relacionado con sus hijos, e incluso con su ex marido.