De su complicidad con Simoneta a su mote: los secretos de Juan Carlos I en Sangenjo, al descubierto
Laurence Debray ha estado junto al Rey emérito durante su última estancia en Sangenjo
El pasado 5 de octubre, Juan Carlos I ganó por cuarta vez la competición europea de vela de 6 metros
En pleno escándalo por la filtración de sus fotografías y conversaciones telefónicas con Bárbara Rey, Juan Carlos I se ha trasladado hasta Sangenjo para alejarse del foco mediático. Como marca la tradición, participó en la competición europea de vela de 6 metros y, el sábado de 5 octubre, consiguió ganar su cuarto título de campeón. Sin duda, una gran noticia que ha supuesto un soplo de aire fresco en medio del escándalo que está protagonizando junto a la vedette. Como no podía ser de otra manera, lo celebraron por todo lo alto y su biógrafa, Laurence Debray, que ha podido vivir en primera persona esta última regata, ha sido la encargada de detallar la reciente estancia del que fuera Jefe de Estado en Galicia.
Aunque fue en 2020 cuando el Rey emérito decidió mudarse a Abu Dabi, siempre que su agenda y su estado de salud se lo permiten regresa a Sangenjo, «donde tiene su habitación, sus costumbres y su ropa de vela», según la escritora francesa mencionada. «Allí cuenta con su segunda familia, su familia marinera, siempre fiel y acogedora», añade. En cuanto a la rutina que sigue en la localidad de Pontevedra, Laurence ha desvelado que cada noche, después de las regatas, Juan Carlos I se reúne con sus compañeros para hablar de los vientos, las velas y las estrategias. «Es una reunión cumbre a la que nunca falta», destacaba.
Juan Carlos en Sangenjo. (Foto: Gtres)
En las páginas de la revista ¡Hola!, Debray ha explicado que las esposas de los mencionados también están invitadas a estas cenas. «Se prepara una larga mesa, en una sala contigua al garaje de la casa. Todos se sientan sin protocolo, junto a familiares y amigos, que han venido a verlo y a apoyarlo», señala. De acuerdo con sus declaraciones, el ambiente de estas veladas es «muy alegre y cálido», ya que todos los comensales ríen muchos mientras recuerdan anécdotas de la competición.
Juan Carlos y la infanta Elena en Sangenjo. (Foto: Gtres)
En cuanto a los apoyos con los que cuenta el Rey Juan Carlos, la biógrafa ha resaltado la presencia de la infanta Elena y la infanta Margarita. Esta última acude junto a su marido, sus dos hijos y sus nietos. Simoneta Gómez-Acebo también está y, según las líneas mencionadas, tiene una gran complicidad con el progenitor del monarca. «Entre ellos, las bromas y las réplicas vuelan como en una partida de ping-pong. Son muy cómplices y divertidos», comenta. Laurence también ha desvelado el mote con el que llaman a Juan Carlos I. «Sus íntimos se refieren a él como ‘El Jefe’.
Juan Carlos y la infanta Elena en Sangenjo. (Foto: Gtres)
Después de disfrutar de unos días en Sangenjo, la escritora considera que esta localidad es un refugio para el Rey Juan Carlos: «Es su forma de desconectar y de encontrar un poco de libertad […] Los participantes de todo el mundo vienen a saludar al ilustre veterano», concluía.