Yarivith González, Premio Princesa de Gerona: "Ha sido el empujón que necesitaba para no dudar más"
La investigadora ha sido una de las ganadoras del Premio Internacional
Yarivith González no pudo estar en la ceremonia de entrega en el mes de julio
No pudo acudir a la ceremonia de entrega de los premios de la Fundación Princesa de Gerona, pero recibir el Premio Internacional en la categoría de investigación ha supuesto un importante empuje para ella. Yarivith González (1988) habla con este digital en una breve visita a Madrid, en la que no ha podido reunirse ni con la princesa Leonor ni con los Reyes, aunque espera poder ver a la Familia Real en la celebración del Día de la Hispanidad. Una cita a la que siempre se invita a un grupo de premiados por la fundación que preside la princesa de Asturias, que pone el foco en el talento de los más jóvenes.
La investigadora fue, junto a Susana Arrechea, una de las galardonadas con el Premio Internacional en la última edición de los premios de la Fundación Princesa de Gerona. Su proyecto está centrado en la investigación y el desarrollo de procesos sostenibles para reciclar y recuperar metales que proceden de baterías de iones de litio de vehículos eléctricos y residuos electrónicos.
Yarivith González en un laboratorio. (Foto: Fundación Princesa de Gerona).
El objetivo fundamental es recuperar metales de alto valor como es el caso del litio, el manganeso, el cobalto, el níquel y otros, para que puedan ser reutilizados en la fabricación de nuevas baterías para la movilidad eléctrica. Esto permite potenciar el ciclo de vida útil de los metales y contribuye con los principios del desarrollo sostenible. De hecho, una de las cosas en las que más insiste es en la importancia de educar en la sostenibilidad, algo que hace 50 años era impensable pero que, poco a poco, va interiorizándose en las nuevas generaciones.
La Familia Real en Gerona. (Foto: Gtres).
Ella no estuvo presente en el acto presidido por la princesa de Asturias, ni pudo participar en todas las actividades paralelas que se desarrollaron los días previos, aunque tiene ganas de acudir al próximo acto de entrega. Quedan aún varios meses para eso y ni siquiera se conoce el nombre de los galardones en las diferentes categorías, pero Yarivith ya forma parte de la amplia comunidad de premiados que, según ella misma explica, es mucho más que un grupo, es una familia. «Esto es una gran familia a la que voy conociendo poco a poco. Todos tenemos en común algo que nos conecta, las ganas de transmitir lo que hacemos y el deseo de salir adelante. Un espíritu de superación que no nos permite darnos por vencidos», asegura la investigadora.
Un reconocimiento muy ilusionante
Han pasado ya casi tres meses desde que le entregaron el premio y, como es lógico, su vida ha cambiado. «De verdad que ha sido realmente fabuloso, porque el premio llegó en un momento de mi vida en el que estaba en una especie de transición. Estaba justamente en la búsqueda de ver qué camino seguir y si continuar investigando o no», explica.
Según ha contado a este digital, justo cuando supo que era una de las ganadoras estaba pensando en darle un giro a su carrera y hacer un cambio, pero el premio le dio la energía que necesitaba para seguir con sus investigaciones: «Fue la respuesta a muchas de las preguntas que tenía. Me dio el empuje para seguir con mi camino. Sentí que era mi deber, mi propósito», ha comentado.
Yarivith posando con su abuela y su madre. (Foto: Cortesía).
Una pasión por la ciencia que empezó cuando era una niña. Ella misma ha contado que su interés por el ámbito científico comenzó cuando acompañaba a su abuela al trabajo. La abuela de Yarivith limpiaba escuelas y ella podía ver las aulas y todo lo que había escrito en las pizarras. Un primer contacto con el camino que elegiría después. Tanto su abuela como su madre han sido dos de los grandes referentes en su vida.
La investigadora es consciente de que ser miembro de la comunidad de galardonados con un premio de la Fundación Princesa de Gerona le ha cambiado la vida a muchos niveles, no solamente profesional. «Ahora siento que tengo la responsabilidad de ser portavoz de muchos jóvenes que se están formando en la misma área que yo, pero también en otras. De motivarles a que la formación y el pensamiento crítico y objetivo son la llave para muchas cosas». Además, el reconocimiento le ha dado una visibilidad que antes no tenía: «He recibido muchas llamadas, de periodistas, divulgadores y colegas», asegura.
La relación con la Familia Real
A pesar de que no pudo estar en la ceremonia de entrega, sí que ha tenido contacto con la Familia Real: «He recibido unas felicitaciones muy cariñosas de ellos, cartas y telegramas», revela. Yarivith considera que es muy importante la labor que realizan los Reyes y sus hijas a través de la fundación, ya que dan visibilidad y apoyan el talento de las generaciones más jóvenes. «Es maravilloso el hecho de que, desde su posición, tomen la iniciativa de reconocer a todos los jóvenes, no solamente de los jóvenes españoles o latinoamericanos, sino también en Portugal», comenta.
La princesa Leonor y la infanta Sofía, en un acto en Gerona. (Foto: Gtres).
Perspectiva de futuro
Para la mayoría de los galardonados, recibir un premio de la Fundación Princesa de Gerona no es tanto un reconocimiento a lo que han hecho, sino un empujón para seguir desarrollándose, ya que se pone el foco en el talento joven. Ella tiene claro que este galardón le ha dado la fuerza que necesitaba para continuar en la misma línea: «Quiero seguir investigando, seguir estudiando, creo que no pararé nunca de estudiar porque es lo que me mueve», sentencia la investigadora, que cree que uno de sus próximos pasos es volver al inicio de la cadena, reciclar sobre lo que ya está reciclado.
Yarivith tiene claro que recibir este reconocimiento ha supuesto toda una revolución en su vida, es más, si tuviera que utilizar unas pocas palabras o expresiones para definir el cambio que ha experimentado, sabe cuáles serían: «Resiliencia, autosuperación, creer en los sueños, ser fiel a tus ideales y mantener el corazón en paz». En definitiva, el premio de la Fundación Princesa de Gerona le ha dado alas para continuar luchando por sus sueños: «Totalmente, estaba buscando el empujón para no dudar nunca más de lo que quería hacer».
La princesa de Asturias es también princesa de Gerona y de Viana, en virtud de las herencias de las antiguas coronas de Castilla, Aragón y Navarra respectivamente.