Vanja Bosnic, la mujer detrás de Luka Modric, el mejor jugador del año
La croata prefiere cederle todo el protagonismo a su marido
Se casaron en el año 2010 y tienen tres hijos
Dicen que detrás de todo gran hombre siempre hay una gran mujer. Algo que también se cumple en el caso de Luka Modric, nombrado mejor jugador del año en los Premios The Best 2018. Vanja Bosnic, a diferencia de otras mujeres de futbolistas como Antonella Rocuzzo o Daniella Semaan, ha optado siempre por permanecer en un discreto segundo plano y dejar que sea su marido el que acapare la atención de los focos.
Luka Modric posó con su familia para celebrar el premio / Gtres
Sin embargo, en eventos como el de ayer la croata no tiene reparo en aparecer y es que lo más importante es mostrarle todo el apoyo al jugador del Real Madrid en los momentos más importantes, y eso hizo. Acompañada de sus dos hijos mayores, Ivano, de ocho años, y Ema, de cinco, Vanja brilló enfundada en un elegante vestido negro que resaltaba su rubia melena y sus ojos verdes. La gran ausente en la cita era la pequeña Sofía y es que, debido a su corta edad, vino al mundo el octubre pasado, sus padres prefirieron que se quedara en casa.
La pareja se conoció en el año 2006 en su Croacia natal, cuando Vanja trabajaba en la agencia de representantes que se encargaba de algunos de los jugadores del Dinamo de Zagreb, en el que jugaba Modric. Los papeles, las llamadas y el trabajo dieron paso al romanticismo y formando a una de las parejas más estables del mundo del fútbol. Bosnic siempre ha estado al lado de su marido, empezando cuando este se marchó a jugar a Londres de la mano del Tottenham y terminando con su mudanza a Madrid, en el año 2012, tras su fichaje por el club blanco.
Si bien los cinco han encontrado en la capital española su hogar, lo cierto es que aprovechan las vacaciones veraniegas para volver a su país natal, donde disfrutan de unos días de asueto en entornos idílicos, como la ciudad de Petrcane, en plena costa dálmata, como la isla de Komiza. Desde ahí Luka Modric aprovecha para apartar el futbol de su mente por unos días y, de paso, de sus problemas con la ley. Hace apenas unos días el centrocampista se declaró culpable de fraude fiscal y aceptó una pena de ocho meses de cárcel y el pago de una multa por 1,4 millones de euros.