Iker Casillas, el renacido
Se cumplen dos años del día que el madrileño volvió a nacer tras sufrir un infarto. Tiempo en el que han cambiado un buen puñado de cosas importantes que le han obligado a reinventarse.
El día 1 de mayo de 2019 cambiaron muchas cosas para Iker Casillas. Sus prioridades fueron una de ellas. El infarto de miocardio que amenazó su vida le hizo darse cuenta de lo importante que es vivir el día a día. El primer aniversario de su gran susto de salud lo pasó reflexionando y apurando sus opciones de volver a ponerse los guantes. Desde entonces, mucho han cambiado las cosas para él: una dolorosa retirada, una mudanza de vuelta, un nuevo trabajo y un divorcio han puesto patas arriba su estabilidad. Llegados al primero de mayo de 2021, el portero vuelve a respirar tranquilidad tras unos meses verdaderamente frenéticos.
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La normalidad retorna a su vida. Pero empecemos por el principio. Mucho se ha hablado ya del infarto. Afortunadamente, Casillas está completamente recuperado y su corazón vuelve a estar fuerte. Es cierto que le ha costado tener que dejar el fútbol antes de tiempo ya que su sueño era retirarse jugando a los 40 años. Pero las cosas no siempre salen como uno quiere y la salud estaba por encima de todo. Ahora es buena y robusta aunque no apta para el deporte de élite.
La mudanza a Madrid
Una vez tomada, con mucha impotencia pero con cabeza, la decisión de ‘colgar las alas’, el madrileño afrontó otra sumamente importante: su tiempo en Oporto se había agotado. Junto a Sara Carbonero y sus dos hijos hicieron las maletas y pusieron fin a un lustro en una ciudad lusa que les enamoró por completo, que guardarán en su corazón para siempre. Madrid les esperaba con los brazos abiertos -de nuevo- y con dos grandes oportunidades laborales en el horizonte.
Iker Casillas y Sara Carbonero / Gtres
El primero en resolver su futuro fue el propio Iker Casillas. Tras varios meses de especulaciones, volvió al Real Madrid, pero lejos del césped. La leyenda volvía a casa pero vestido de traje y en las oficinas del Bernabéu. Su rol, director adjunto a la Fundación Real Madrid. Un cargo que al principio parecía tener cierto oscurantismo por su tardío debut. No obstante, la realización de actos presenciales ya ha comenzado y su actividad más fluida. A destacar que Iker no percibe salario alguno por ello. En lo que a la periodista se refiere también protagonizó su regreso al pasado al fichar por Radio Marca, emisora donde empezó su carrera, para ponerse al frente de ‘Que siga el baile’, una sección radiofónica de entrevistas.
El divorcio de Iker Casillas y Sara Carbonero
El último gran cambio en la vida del exportero del Real Madrid desde que sufriera el infarto ha tenido que ver con su condición sentimental. Su matrimonio con Sara Carbonero saltó por los aires tras bastantes meses de rumores. El pasado 12 de marzo hicieron oficial su separación. Como pareja no daban para más y su prioridad era garantizar el bienestar de sus dos hijos en común. Optaron por iniciar caminos separados, siempre en buena sintonía. Buen ejemplo de ello es que solo han tardado un mes en firmar el acuerdo de divorcio por el cual la periodista se queda viviendo en el domicilio familiar, con la custodia de los pequeños, e Iker se hace cargo de los gastos escolares de Martín y Lucas. El régimen de visitas sería cómodo para él.
En definitiva, Iker Casillas se ha visto obligado a renacer una y otra vez de sus cenizas. Ahora vuelve a volar, solo, pero volando.