Georgina 1-0 Aveiro: giro radical al retiro dorado de Cristiano Ronaldo

Cristiano Ronaldo y el Manchester United han hecho buena la máxima de acción, reacción. El club inglés acaba de comunicar oficialmente la marcha del delantero portugués «con efecto inmediato y de mutuo acuerdo», según se puede leer en un comunicado oficial emitido desde las oficinas de Old Trafford. Un movimiento que llega como consecuencia de la explosiva entrevista que concedió hace tan solo unos días a Piers Morgan y en la que cargó duramente contra el equipo de los ‘diablos rojos’.

Cristiano Ronaldo is to leave Manchester United by mutual agreement, with immediate effect.

The club thanks him for his immense contribution across two spells at Old Trafford.#MUFC

— Manchester United (@ManUtd) November 22, 2022

El hecho de hacerlo público tan pronto responde a la necesidad que tanto CR7 como el United tenían de separar sus caminos. Su relación se había tornado en irreconciliable y no podían seguir ni un segundo más manteniendo un vínculo que iba a ninguna parte. Esta decisión genera un importante golpe de efecto en el lado más personal de Cristiano Ronaldo: su familia. Tan solo un año y tres meses después de aterrizar en la industrial ciudad británica, Georgina Rodríguez y él se ven obligados a afrontar un nuevo cambio de vida tras los ya experimentados en Italia y hasta ahora en Manchester.

La nueva vida de Cristiano Ronaldo y Georgina

¿Dónde van a mudarse? Esa es la pregunta que a esta hora todo el mundo se hace. Aunque todos los caminos pasan por un retiro dorado del futbolista a Portugal, lo cierto es que en las últimas horas han cogido fuerza otras opciones. Este digital ha podido saber por fuentes de toda solvencia cercanas al entorno del padre de las hijas de Georgina que CR7 mandó acelerar las obras de la espectacular mansión que adquirió en Lisboa. Esto se interpretó como una pista clara que alimentaba la posibilidad de que hicieran las maletas rumbo al país vecino.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Cristiano Ronaldo (@cristiano)

Otro frente abierto que tienen ahora Cristiano Ronaldo es la educación de sus cinco hijos, una de ellas -Bella Esmeralda-recién nacida este año. Para ellos es primordial que crezcan en un buen entorno. Durante una visita a Lisboa el pasado mes de septiembre estuvieron visitando varios colegios. Uno de ellos fue el Saint Julian´s College, situado en Carcavelos, una localidad costera a medio camino entre Cascais y Lisboa, donde estudia buena parte de los hijos de las élites lusitanas. Hay que destacar que hasta el mes de septiembre tenía inscritos a los pequeños en un colegio lisboeta, en el británico de Madrid y otro en Manchester, no cerrando así ninguna puerta. 

Lo que es un hecho es que la prensa lusa arde especulando con cuál será su futuro, si bien no creen que sea inminente su regreso y empiezan a ver cómo se aleja el sueño de tenerle de vuelta. Sea como fuere, de confirmarse, sería como la de un hijo pródigo que regresa a casa por Navidad, cual anuncio de turrones y nunca mejor dicho. El palacete donde podrían vivir estará dentro de un terreno con una extensión de 10 mil metros cuadrados y constará en total de unos 3 mil metros, así como todo todo lujo de detalles. Pero ir a Portugal implica que Georgina Rodríguez tenga que enfrentarse a un panorama áspero y poco acogedor ya que su relación con la familia del crack de Madeira es prácticamente nula y sus momentos se cuentan por polémicas. Esto se ha hecho especialmente palpable en el caso de Elma y Dolores Aveiro.

Cuando todo el mundo esperaba la mudanza lógica a Portugal, aparecen en escena dos tentadoras nuevas opciones para Cristiano Ronaldo. Por un lado, quedarse en Inglaterra para jugar en el Newcastle, al norte de las islas británicas. Por el otro, algo mucho más exótico y diferente a todo lo que tanto Georgina como él han vivido: una mudanza a Arabia Saudí. Allí jugaría en el Al-Nassr. Se da la circunstancia de que ambos clubes tienen el mismo dueño, Mohammed Bin Salman, heredero al trono saudita. En cualquiera de los dos escenarios, Georgina Rodríguez se apuntaría un tanto en su particular guerra fría con los Aveiro. Tic, tac, tic tac…