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Televisión

Matthew Perry: sale a la luz la cuantiosa herencia del actor de ‘Friends’

El actor no tuvo hijos y tampoco se casó

  • Nacho Molina
  • Periodista especializado en información de corazón y televisión. Me paso la vida hablando de la vida de los demás. Antes en La Vanguardia.

La muerte de Matthew Perry ha sido un duro golpe para los fans de la serie Friends y todos sus compañeros de reparto, que han visto como su amigo se marchaba mucho antes de lo que debía. Una de las incógnitas es qué ocurrirá con su herencia tras su fallecimiento.

Los familiares y amigos del actor se han podido despedir de él en una ceremonia íntima celebrada en el cementerio Forest Lawn, en la que estaban David Schwimmer, Lisa Kudrow, Courteney Cox, Jennifer Aniston y Matt LeBlanc, sus compañeros de la serie.

Entre sus familiares estaban sus padres Suzanne y John, divorciados desde hace años, y su padrastro Keith. Ellos son su familia más cercana, por lo que la enorme herencia que dejar podría ir a ellos. El actor no se casó nunca y tampoco tuvo hijos, por lo que es a falta de saber si tenía testamento, todo hace indicar que su patrimonio de repartirá entre sus padres.

Según recoge el portal Celebrity Net Worth, especializado finanzas de famosos, Perry podría haber dejado más de 120 millones de dólares de patrimonio. Este dinero, en gran parte, es gracias a la mítica serie, por la que recibía cerca de 20 millones de dólares todos los años gracias a sus pases en televisión y en plataformas de streaming, donde es una de las grandes series por las que pelean gigantes como Netflix, Prime Video o HBO.

Tras su muerte, ese dinero que genera cada año irá a parar a sus beneficiarios, aunque está por saber quién será. Existe la posibilidad, tal y como ha anunciado la CNBC, de que haya dejado parte de su legado a una entidad, por lo que el sindicato de actores podría llevarse un buen pellizco.

Tampoco hay que descartar que, aconsejado por un asesor, nombrase a una persona que se encargase de gestionar su patrimonio. Lo más probable, ya que no tenía mujer ni hijos, es que todo llegue a sus padres, que serían los encargados de gestionar sus ganancias y propiedades.