El partidazo con mayúsculas de España ante Italia no tardó demasiado en despertar reacciones de asombro con el juego de nuestros internacionales, pero los titulares con los que hemos amanecido este viernes reflejan todavía más la magnitud del fútbol que se vio en Gelsenkirchen. Las grandes cabeceras de la prensa mundial se han rendido a la selección española liderada por Luis de la Fuente, que ya es plena candidata a llevarse la Eurocopa.

Las sensaciones que se comenzaron a vivir tras la contundente victoria contra Croacia se han confirmado después del baile a los italianos. Con un estilo radicalmente distinto, la armonía de los chicos de De la Fuente y un juego abrasivo para los rivales recuerda mucho a la inocencia con la que la generación que nacía en 2008 aplastaba a uno tras otro hasta proclamarse campeones de Europa.

Los años han pasado, aunque el verdugo y el máximo afectado de este nuevo estilo que nació en el estadio del Schalke ha sido el mismo: Italia. Los medios de comunicación italianos se debaten este viernes entre atizar a la selección de Luciano Spalletti o simplemente rendirse a una versión de España que poco o nada permitió hacer a los italianos durante los 90 minutos.

La Gazzetta dello Sport prefiere tachar a Italia de «piccola», pequeña en castellano, después de lo sucedido en la gloriosa noche de un jueves 20 de junio que ya pasa a la historia del fútbol de nuestro país. Razón no le falta a esta edición, pues España empequeñeció a los italianos, campeones de la última Eurocopa y verdugo de los nuestros en aquella semifinal de Wembley en 2021. «España domina, pero basta con empatar con Croacia», añaden para sacar una nota positiva».

El Corriere dello Sport habla de «reset». Eso es lo que necesita Italia a tres días de enfrentarse a Croacia en su primera final de esta Eurocopa. Como bien decía la cabecera anterior, a los de Spalletti les vale el empate para pasar a octavos, aunque la selección croata de Luka Modric está dispuesta a dar guerra tras salvar un punto contra Albania en el segundo partido de la fase de grupos.

«Y todavía pudo ser peor…» deja caer Tuttosport con su portada de este viernes, en la que lucen Lamine Yamal y Morata en una imagen sacada de la celebración del único gol del partido, el de Calafiori en propia puerta, al que se le ve completamente hundido sobre el césped. «Partido sin historia», se añade. Toda la historia la puso España, salvo en esos últimos compases del descuento en los que una Italia con más fe que ideas trató de rascar el empate.

Sphera Sports amanece con un portadón titulado como «La dolce vita», que poca traducción requiere. Habla del baño de buen fútbol que la nueva España le dio a esta Italia venida a menos, pero que guerreó hasta su último aliento.