Antonio Rüdiger se entrenó con normalidad en la sesión previa al duelo contra el Girona. El central alemán se ejercitó junto al resto de sus compañeros con un vendaje en el gemelo derecho, lo que no le debería impedir jugar en Montilivi contra los de Michel.
El jueves, tras el duelo contra Las Palmas, donde terminó tocado, se confirmó que Antonio Rüdiger no sufría una lesión grave en el gemelo. El alemán terminó el duelo contra los insulares renqueante, pero no horas después recuperó con no normalidad.
Cuando el árbitro pitó el final del encuentro, Rüdiger se tiró al césped tras sentir la lesión y se retiró al vestuario cojeando. En un primer momento, parecía que era un golpe y Ancelotti manifestó que confiaba en que estuviese contra el Girona, algo que finalmente va a ser posible no teniendo que recurrir a una pareja de centrales de emergencia.
Hay que recordar que el que no podrá estar contra el Girona es Alaba, que se lesionó contra Las Palmas. El central sufre molestias en el abductor de la pierna derecha y será sometido a pruebas para conocer el alcance de la lesión.
Con cuatro bajas
El Real Madrid se entrenó en Valdebebas con cuatro ausencias. Ancelotti no pudo contar con Courtois, Militao, Alaba y Arda Güler. Además, el italiano contó con varios canteranos como fueron Nico Paz, Carrillo y Marvel, que pueden ir con el primer equipo a Gerona. También se entrenaron junto a los porteros Ferran y Piñeiro.
El Real Madrid llega a este partido segundo a un punto, precisamente, del Girona. Los catalanes están haciendo historia tras ser líderes por primera vez. Por lo tanto, el duelo que se celebrará en Montilivi será por todo lo alto de la clasificación. El que gane se lleva el premio de estar en el primer puesto una jornada más.
Rüdiger, un portento físico
El central del Real Madrid apenas ha sufrido lesiones importantes desde que fichó por el club blanco, siendo una ausencia de 16 días por una lesión en el tendón de la corva su dolencia más grave como madridista. Rüdiger, sin embargo, sí ha sufrido lesiones de mayor índole a lo largo de su carrera, especialmente cuando militó en el Chelsea.
El defensa alemán permaneció 86 días de baja después de un golpe en la pelvis que derivó también en dolencias en la ingle. El jugador se tuvo que perder 18 partidos con su club y esa lesión es recurrente para él porque el año pasado ya recayó levemente perdiéndose una semana en el mes de abril por este motivo.