Rodrygo dio un golpe sobre la mesa y se marcó un gigantesco partido en Cádiz para servirle la victoria en bandeja al Real Madrid y colocar a los blancos en lo más alto de la clasificación. El brasileño no iba a salir de inicio e iba a descansar, pero unos problemas estomacales de Brahim lo obligaron a salir desde el principio. Sacó sus galones con dos goles extraordinarios y una asistencia.
El encuentro en Cádiz, antes de empezar, ya comenzó accidentado para el Real Madrid. Carlo Ancelotti le dio la oportunidad a Brahim de salir de inicio y Rodrygo se quedaba en el banquillo. Pero antes de salir a calentar, Brahim tuvo unos problemas estomacales y no pudo salir a jugar. Otra baja para los blancos, que no son pocas. El brasileño salió de inicio y estuvo muy activo desde los primeros minutos de juego.
Durante los primeros minutos de juego ambos equipos tuvieron llegadas. Rodrygo avisó con un disparo tímido en los primeros compases de partido. Esa fue la antesala de la joya que se iba a inventar poco después, en el minuto 13 de encuentro. El atacante brasileño no iba a ser titular en Cádiz, Ancelotti quiso reservarlo. Pero el destino y unos inoportunos problemas estomacales de Brahim provocaron que en el Nuevo Mirandilla fuese la tarde Rodrygo.
En Cádiz era el día de Rodrygo. Desde poco antes de las 17:00, cuando salió el once del Real Madrid, nadie lo esperaba en el once. No estaba. De hecho, el speaker del cuadro gaditano no lo anunció minutos antes del partido, cuando ya sí se sabía que iba a ser de la partida por los problemas de Brahim. Empezó el partido muy activo y a los 13 minutos de juego adelantó a los blancos con un golazo espectacular.
Rodrygo dio un golpe sobre la mesa
Rodrygo Goes marcó su cuarto gol en Liga y su sexto tanto de la temporada en Cádiz para adelantar el Real Madrid en un encuentro complicado. Tras el doblete contra el Valencia justo antes del parón, el atacante brasileño volvió a mojar y demostró que tiene su escopeta totalmente afinada. Se fue con gol a Brasil y volvió igual. Sorteó hasta cuatro defensas amarillos desde una esquina del área, se fue centrando, nadie pudo frenarlo y puso la pelota en la escuadra de la portería de Ledesma con una calidad brutal.
El compromiso, el esfuerzo y el partido de Rodrygo en Cádiz estaba siendo impresionante. En el minuto 35 bajó a ayudar en defensa, hasta la frontal. Recuperó la pelota, la sacó jugada hacia la banda, se marchó conduciendo como un centrocampista y terminó desmarcándose como delantero que es. En una sola jugada lo fue todo. Se sentía importante y lo estaba siendo.
En el inicio de la segunda mitad, Rodrygo rozó el segundo del Real Madrid y su doblete particular en Cádiz. El brasileño estaba siendo lo más peligroso sin duda de su equipo. Sorteó a varios rivales con una gran verticalidad hasta plantarse ante Ledesma y prácticamente regateó al portero rival. Pero el cuero se marchó fuera. Rodrygo pensó que Joselu la empujaría y el delantero español pensó lo opuesto. Al final nadie remató y el gol se esfumó.
Pero Rodrygo quería ganar el partido. Y lo quería hacer a su manera y él solo. En el minuto 65 volvió a inventarse una jugada individual llena de calidad y sentenció el partido con su doblete particular y su séptimo gol de la temporada. El atacante brasileño aprovechó el destino, volvió a tirarse contra el área rival, sorteó rivales como si fueran muñecos y anotó con una facilidad pasmosa. Dos dobletes consecutivos en Liga que lo convierten en esencial para los blancos.
Bellingham sentenció el choque
Lunin también tuvo su parte de protagonismo en Cádiz. Al borde del descanso tuvo que sacar una mano prodigiosa tras un disparo desde la frontal. La estirada del ucraniano fue espectacular y clave para evitar el empate. Luka Modric también dejó detalles de que le queda mucha gasolina todavía. Fueron dos jugadas concretas. Una en defensa salvando un pase rival. Otra en el medio con un movimiento de mago, con caño incluido, para regatear a dos defensas.
En la segunda mitad, Luka Modric volvió a dejar detalles de su inagotable calidad. En el minuto 63 cogió la pelota en la frontal, se lo pensó poco y estrelló la pelota en el poste. El mediocentro croata estaba cuajando un partido magnífico. Con las lesiones de Camavinga y Tchouaméni tendrá más protagonismo en el equipo. Y lo está aprovechando con su clase habitual. Modric terminó marchándose agotado y ovacionado por la grada de Carranza.
Jude Bellingham hizo el tercero en el minuto 74 tras una gran asistencia de Rodrygo, que fue el mejor. El británico volvió a marcar un nuevo tanto en su cuenta particular tras aprovechar un buen pase y batir a Ledesma con un gran remate raso. Lo celebró con gran entusiasmo con la grada madridista desplazada. Ya lleva 14 tantos esta temporada.