Las palabras pronunciadas por Nasser Al-Khelaïfi durante la presentación de Luis Enrique como nuevo entrenador del PSG acerca del futuro de Kylian Mbappé en el conjunto galo no tardaron en recibir su réplica por parte del delantero. El presidente de la entidad parisina dejó claro que no podrían dejar «irse gratis al mejor jugador del mundo». «Él dijo que nunca se iría libre», añadió. El atacante encajó estas afirmaciones con tranquilidad y confirmando a los galos que iba a mantener su postura. Es decir, no renovar, cumplir el contrato que le ata en el Parque de los Príncipes hasta 2024 y, después, salir libre.
Mbappé mantiene el pulso al PSG. Si la entidad francesa le puso en venta públicamente y le dio un plazo de dos semanas para resolver la situación, el jugador no se inmuta y continúa con una estrategia donde el objetivo principal es ganar tanto en lo deportivo como en lo económico. Kylian va a mantener su postura de querer cumplir su contrato con los parisinos con el único objetivo de cobrar la mayor cantidad posible del estratosférico contrato que los qataríes utilizaron en 2022 para que no se fuese libre al Real Madrid.
Mbappé no tiene el mínimo inconveniente en dejar este verano el PSG, pero tendrá que ser el club el que le venda y no él el que diga que quiere salir. De por medio, hay una prima de fidelidad de 80 millones de euros que quiere cobrar sea como sea y que desde Qatar, que sin decirlo le pusieron en venta ante el mundo entero, tratarán de ahorrarse. El medio francés Radio Montecarlo añadió que de estos 80 millones, cobraría 40 kilos si sigue en París pasado el 31 de julio y el resto, la otra mitad, a partir del 1 de septiembre. Por este motivo, los galos quieren que todo se resuelva este mes.
Mbappé y su entorno saben todo esto y la estrategia es más que clara. Es un secreto a voces que el deseo del jugador y de su madre, Fayza Lamari, es que Kilyan juegue en el Real Madrid cuanto antes mejor, pero en este proceso no pueden ser ellos los que den el paso de querer salir. Y es que, el clan del futbolista está convencido de que si, como ha sucedido, es el PSG el que manifiesta su deseo de venderle, impidiéndole cumplir su compromiso, la prima de fidelidad que tendría que abonarle la entidad francesa sería una obligación. El entorno del futbolista cree que en este escenario al que se va dirigiendo el culebrón, en el caso de emplazar al que es todavía su club a un litigio si se niegan a pagar la prima, lo podría ganar, ya que el futbolista no ha pedido en ningún momento ser traspasado.
Tranquilidad en el Real Madrid
Mientras, desde Valdebebas observan muy tranquilos todos los movimientos. No tienen que levantar el teléfono para estar al tanto de lo que va sucediendo, puesto que están plenamente informados en todo momento a través del entorno de Mbappé. Como contó OKDIARIO, el club blanco no tiene la más mínima intención de entrar en esta guerra, donde es un mero espectador, como el resto del planeta fútbol.
Eso sí, desde el Real Madrid tienen el dinero preparado para afrontar el fichaje de Mbappé este mismo verano si surge la posibilidad. Desde el club creen que la operación se irá a los 250 millones de euros. La entidad madridista estaría dispuesta a ofrecer unos 140 kilos fijos más 30 en variables al PSG, mientras que el resto podría ir a parar al jugador. No obstante, y viendo que son los parisinos lo que quieren vender sí o sí si no renueva, esperan que no supere los 200 millones.