Luka Modric sigue dándole a la manivela. Una y otra vez. El croata está empeñado en llevarle la contraria a la lógica, esa que dicta que el tiempo acaba atrapando a todo el mundo. Luka continúa corriendo más rápido, cualquiera diría que su DNI marca 39 años. En lo que va de marzo ha confirmado su presencia en todos los partidos posibles, los seis con el Real Madrid y ambos de la Nations League con Francia.
Sin embargo, el croata no asombra por lo que hace, sino por cómo lo hace. Muestra un estado físico óptimo en el momento clave de la temporada cuando sobre su próxima tarta de cumpleaños se apoyarán 40 velas. En ausencia de Ceballos por lesión, Modric ha sido titular en seis de los ocho partidos que ha jugado este mes, lo que se traduce en dos partidos por semana y en rendimiento.
Ancelotti es consciente de ello. «Modric es un regalo para el fútbol. Tiene que seguir hasta lo que él quiera. Lo que hace, lo hace muy bien. El Real Madrid tiene la suerte de tener una leyenda y el fútbol tiene un gran regalo por su seriedad, profesionalidad y calidad», aseguró. El croata se convirtió el pasado mes de octubre en el jugador del Madrid que ha jugado un partido con más edad.
Y, si a final de temporada renueva, se convertiría en el primer futbolista de la historia del club blanco que se viste de corto a los 40 años. «Quiero renovar porque me lo merezca, no porque me lo regalen». Lo tiene claro Modric y su rendimiento sobre le terreno de juego le da razón. Contra el Rayo, hace unas semanas, asistió para que Vinicius anotara un tanto a la postre fue definitivo.
Modrid y el Real Madrid tendrá una reunión a final de curso
Aunque la actuación de la temporada que probablemente más retumbe entre la afición madridista la protagonizó en Balaídos. Swedberg había neutralizado el gol de Mbappé y entonces Ancelotti recurrió a Modric para revertir el guion. Tres minutos necesitó el balcánico para filtrar la asistencia del gol del triunfo a Vinicius. Ese día fue cuando superó a Ferenc Puskas como futbolista más veterano del Real Madrid en disputar un encuentro.
Modric y el Real Madrid tienen una charla pendiente para resolver su futuro. El croata acaba contrato el próximo 30 de junio y deberán decidir qué hace. En un primer momento, la idea de la entidad madridista era poner punto final a esta vinculación con un jugador que el próximo 9 de septiembre cumplirá 40 años.
Aunque si termina la temporada a un gran nivel, la puerta de la continuidad no está ni mucho menos cerrada. Especialmente, si el curso que viene, Ancelotti sigue siendo el entrenador de la entidad madridista. Hasta que Modric quiera siempre que Modric continúe regateando al tiempo.