Los jugadores del Atlético celebraron el empate (1-1) con el Real Madrid con el fondo del estadio en el que hay aficionados que antes habían lanzado objetos cerca de la zona en la que se encontraba el portero madridista, Thibaut Courtois. Todos los futbolistas saltaron y cantaron junto a los ultras del Frente Atlético después del gol de Ángel Correa en el descuento, momento en el que estalló el éxtasis en el Metropolitano.
Tremenda la imagen que se vio en el Metropolitano del 64′ al 70′ del derbi. Los jugadores del Atlético y su entrenador, Cholo Simeone, tuvieron que ir al fondo del estadio en el que se ubicaban los ultras radicales del Frente Atlético, la mayoría de ellos encapuchados, a pedir que detuviesen el lanzamiento de objetos que obligó al árbitro Busquets Ferrer a parar el partido durante varios minutos.
El gol del Real Madrid, obra de Eder Militao, fue el detonante de esta lamentable situación que dio una imagen lamentable de parte de la afición del conjunto rojiblanco. Todo sucedió en la parte del terreno de juego en la que se encontraba Courtois, que alertó al árbitro de lo que estaba sucediendo. Y es que varios aficionados estaban lanzando mecheros y botellas, lo que impidió el transcurso normal del encuentro.
Por la megafonía del estadio, ante la repetición de los lanzamientos, se avisó hasta en tres ocasiones de que parasen. Los protagonistas volvieron al campo más de diez minutos después y Simeone seguía pidiendo cabeza a ese sector de aficionados del Atlético. José María Giménez y Koke Resurrección, dos capitanes, fueron los futbolistas colchoneros que más insistieron en que cesaran.
El colegiado del partido fue hasta en tres ocasiones a avisar al delegado de campo para que por megafonía avisasen que el lanzamiento de objetos tenía que parar. A la tercera, y tras avisar que se podía detener el encuentro, Busquets Ferrer decidió detener el derbi madrileño tras un bochornoso acto de los ultras colchoneros.
Después de 20 minutos con el encuentro parado y con los jugadores en vestuarios, el colegiado reanudó el derbi madrileño. Los jugadores calentaron varios minutos y el juego se reanudó nuevamente tras unos incidentes que ensucian la Liga española. Por suerte, ningún objeto impactó sobre el portero del Real Madrid, pero el belga fue varias veces a avisar a Busquets Ferrer por los incidentes causados por los ultras del Atlético.
«Ha sido un momento de mucha tensión y esto no puede pasar en un campo de fútbol. Por cuatro no podemos perjudicar a toda nuestra gente», dijo Koke en su declaración postpartido en los micrófonos de DAZN.