Djené se pasó de frenada y le dio un pisotón tremendo a Aurélien Tchouaméni en un balón dividido en el minuto 26 del partido aplazado de la jornada 20 de la Liga EA Sports. El Real Madrid se medía al Getafe en el Coliseum y fue sometido a una cacería por parte de los jugadores azulones. La entrada más salvaje la recibió el pivote francés, pero el árbitro De Burgos Bengoetxea sólo sancionó la acción con tarjeta amarilla y perdonó la expulsión al central getafense. El colegiado vasco también se comió un penalti claro de Gastón Álvarez sobre Brahim Díaz en los últimos minutos de la segunda mitad.
El defensa del Getafe fue con todo a por la pelota y en su esfuerzo se llevó por delante el empeine de la bota de Tchouaméni. La falta fue durísima, pero el colegiado del choque no la consideró suficiente como para enseñarle la cartulina roja. Por suerte sólo fue un susto y el galo pudo continuar con total normalidad pese a ser una zona delicada para él por la que estuvo cerca de un mes lesionado tras una falta muy similar en Montjuic contra el Barcelona.
Pero esa no fue la única acción polémica del duelo. Poco después del pitido inicial, Vinicius Junior fue derribado en el área por José Ángel Carmona, que le hizo la guadaña y le impidió disparar. Ni De Burgos ni Jaime Latre desde el VAR la consideraron meritoria de penalti y el Real Madrid no tuvo la oportunidad desde los 11 metros.
Y es que el Getafe cometió seis faltas por una de los blancos en una primera parte en la que el Real Madrid se adelantó en el minuto 14 con un golazo de cabeza de Joselu Mato. La jugada la cocinó Lucas Vázquez, que puso un centro tremendo al delantero centro por el que optó Carlo Ancelotti para el choque liguero de este jueves. Y el propio Joselu se encargó de marcar el 0-2 para dejar sentenciada la contienda.
De Burgos perdona un penalti claro
Y ya cuando el partido estaba llegando a su fin, Gastón cometió un penalti clarísimo sobre Brahim, que lo único que provocó en De Burgos fue una sonrisa al mandar a los futbolistas del Real Madrid sacar de esquina. El mediapunta era claramente derribado y trabado para buscar un disparo con el que hacer el 0-3, pero el árbitro volvía a evitar señalar la pena máxima.
El resultado final de faltas cometidas por uno y otro equipo fue insultantemente superior para el Getafe. Los azulones hicieron 16, mientras que los de Ancelotti sólo cinco. Pero una vez más al Real Madrid le sacaron más amarillas que a su rival habiendo realizado menos entradas (2).
