Vinicius y Mbappé. Mbappé y Vinicius. Ese es el vínculo que se ha instaurado en el Real Madrid, a pesar de que muchos se empeñen en hablar de una mala relación entre ambos. Fue Carlo Ancelotti quien decidió darles libertad absoluta a la hora de elegir quien lanza penaltis. Algo debió ver. Si el primero de la temporada (Las Palmas, 1-1) lo lanzó el brasileño, para el segundo (Betis, 2-0) fue el ex del Paris Saint-Germain quien se encargó.
Un cuatro de cuatro que se completa con los dos lanzamientos de este sábado en Anoeta en el encuentro de la jornada 5 de la Liga EA Sports. Vinicius marcó el primero tras una mano clara en el área de Sergio Gómez y Mbappé hizo lo propio 17 minutos después gracias a que el propio brasileño provocase un pisotón de Aramburu que obligó a Martínez Munuera a señalar la segunda pena máxima del partido.
Vinicius lo transformó a pesar de un ligero contacto con el balón de Álex Remiro y Mbappé no dejó lugar a dudas con un trallazo ajustado pegado al palo derecho. Imparable para el portero de la Real Sociedad. Esta alianza, además de ser número uno del mundo en lo futbolístico, también parece que lo es en lo personal. Y es que entre genios se entienden…
La primera pena máxima la provocó Arda Güler con un chutazo desde la frontal que impactó en la mano de Sergio Gómez. La acción no dejaba lugar a dudas y Martínez Munuera señaló el lanzamiento desde los 11 metros acertadamente. Antes, la Real Sociedad había gozado de tres ocasiones claras que dieron en el palo. Dos fueron de Luka Sucic y la otra, aún más favorable, de Becker.
Vinicius y Mbappé, tal para cual
El encargado, a diferencia del último choque en el Santiago Bernabéu ante el Betis cuando el penalti lo transformó Mbappé, fue Vinicius. Ya lo tiró en Las Palmas y este sábado repitió en San Sebastián para rubricar su segundo tanto en Liga. Tras adelantar al Real Madrid, el brasileño se llevó la mano a la oreja en primer lugar y acto seguido el dedo índice a la boca en un gesto que fue pitado por la grada del Reale Arena.
En una noche en la que el más activo estaba siendo Mbappé, Vinicius fue la mejor noticia del Real Madrid, pues gracias a su gol vencía antes de los minutos decisivos. Antes, en la primera parte, la nota negativa la daba Brahim Díaz, que caía lesionado y obligaba a Ancelotti al jugador que había sacrificado en el once inicial, Rodrygo Goes. La lesión del marroquí, a falta de conocerse la duración, se une a la plaga que sufre el equipo blanco con Tchouaméni, Bellingham, Alaba, Camavinga y Ceballos.
