El Real Madrid sufre y remonta para seguir imbatido en ACB
El Real Madrid sumó una victoria más en Liga Endesa después de imponerse a Obradoiro (84-77) en un partido en el que tuvieron que remontar tras una mala primera mitad. Laprovittola y Tavares fueron los jugadores más destacados del equipo madridista
El Real Madrid continúa invicto en la Liga Endesa. El conjunto blanco supo levantarse tras una primera mitad muy negativa ante el Obradoiro y le dio la vuelta al marcador para llevarse el triunfo por un apretado marcador de 84-77. Un tercer cuarto magnífico en ataque y, sobre todo, en defensa de los de Pablo Laso les permitió sumar un nuevo triunfo en la competición doméstica, donde los resultados son contrarios a los de la Euroliga.
Después de una semana muy ajetreada entre el doble compromiso de Euroliga –victoria ante el Khimki, derrota en Milán–, el Real Madrid se enfrentaba al Obradoiro en un Wizink desangelado y en un día y horario poco habitual para tratarse de un partido de Liga Endesa. El cúmulo de positivos y aplazamientos obligaba a la disputa entre semana del choque, y los blancos no salieron todo lo conectados que deberían ante un rival teóricamente inferior.
Campazzo, en los minutos de que dispuso, confirmó que no está en su mejor momento, probablemente afectado por su decisión de abandonar el equipo en mitad de temporada para probar suerte en la NBA. El argentino no está siendo la guía que necesita el Madrid y el equipo lo pagó con una primera mitad que no llegó al aprobado y en la que el acierto de Obradoiro en el tiro, sobre todo reflejado en Robertson, y sus 26 puntos al término del encuentro, mellaron en un sistema defensivo muy irregular.
El resultado al descanso, con el Obra cuatro puntos por delante del Madrid, obligaba a una remontada en tiempos de crisis para el conjunto blanco. En esta ocasión la ‘Lasina’ no fue pública pero a buen seguro se vivió en vestuarios, y es que el lavado de cara del Real fue absoluto en el tercer parcial. Desahogados en ataque con un gran Laprovittola como timonel y un muro en defensa, guiado por Garuba y sobre todo, un brillante Tavares, voltearon el encuentro a falta del último cuarto.
Una vez ahí, se preveía un paseo para el Madrid con Obradoiro pagando el esfuerzo, pero los blancos no terminaron de dar con la tecla y si bien pudieron atar la victoria, no lo hicieron con la brillantez esperada y vuelven a sumar una jornada de luces y sombras dentro de un inicio irregular de temporada.