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El presidente del Parlament balear echa a 2 socialistas por llevar camisetas de ‘La Pasionaria’ Picornell

Las dos diputadas socialistas expulsadas son miembros de la Mesa del Parlament

Toda la izquierda ha abandonado el pleno que debatía la derogación de la Ley de Memoria Democrática

Nueva polémica en el Parlament balear por la figura de Aurora Picornell. El presidente de la Cámara, Gabriel Le Senne (Vox), ha expulsado de la sala de plenos a la vicepresidenta segunda de la Mesa, Mercedes Garrido, y la secretaria segunda del Parlament, Pilar Costa, ambas del PSOE, por llevar camisetas con la imagen de Aurora Picornell, conocida como La Pasionaria de Mallorca.

Le Senne ha ordenado en un primer momento para el pleno durante el debate de las enmiendas a la totalidad a la derogación de la ley de memoria democrática. Lo ha hecho después de que la portavoz de Vox, Manuela Cañadas, haya cuestionado la imparcialidad de los miembros de la Mesa al llevar una camiseta con la imagen de fotos de víctimas del franquismo, y tras una breve discusión con Garrido.

Tras llamarlas al orden y éstas negarse a abandonar la Mesa finalmente han sido expulsadas del Parlament. Tras ellas, todos los diputados de la izquierda, PSOE, MÉS per Mallorca, Més per Menorca y Unidas Podemos, han abandonado la sala en señal de protesta.

La imagen de Aurora Picornell rompe la neutralidad de la Mesa del Parlament. Por ello, Le Senne ha invitado a Garrido y Costa a seguir luciendo las camisetas desde su escaño, no desde la Mesa. Sin embargo, las socialistas han rechazado esta invitación, por lo que han sido expulsadas definitivamente de la Cámara.

«La imagen que llevan mis compañeras las posiciona en un lado del debate que vamos a emprender. La Mesa debe mantener la seriedad y la imparcialidad. Es mi criterio, pueden no compartirlo, pero les ruego que lo acaten», ha argumentado Le Senne.

Cabe recordar que el presidente del Parlament balear ya expulsó a estas dos diputadas del PSOE en junio por la misma razón. Ambas lucieron en su portátil fotos de Aurora Picornell durante el debate de toma en consideración de la proposición de ley de Vox para derogar la Ley de Memoria democrática.

Meses después, el episodio se ha vuelto a repetir y las socialistas han violado la neutralidad de la Mesa por segunda vez por exhibir orgullosas imágenes de Picornell, que tal y como informó OKBALEARES, se trata de una destacada militante comunista que fue pareja de Heriberto Quiñones González, espía de Stalin y autor intelectual de uno de los episodios de represión más sangrientos de la Guerra Civil, el asesinato a sangre fría en noviembre de 1936 de mas de 70 personas prisioneras del bando republicano en el barco Atlante, anclado en el puerto menorquín de Mahón.

La izquierda entra en cólera

El portavoz del PSOE balear, Iago Negueruela, ha recriminado a Le Senne su decisión. «No es motivo para la expulsión en ningún caso. Está haciendo una interpretación arbitraria sin querer escuchar el criterio de los letrados. Para el PSOE en ningún caso vamos a aceptar que se expulse a alguien por llevar camisetas de víctimas franquismo». De hecho, Negueruela ha dicho que lucir un crucifijo también podría entrar en esta consideración.

El portavoz de la formación independentista Més per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha indicado que «expulsar a estas dos miembros de la Mesa no les está expulsando sólo a ellas, está expulsando a unas víctimas del franquismo y de la guerra civil». En sus redes sociales, el partido ecosoberanista ha tachado a Le Senne de «fascista».

Por su parte, la diputada de Podemos, Cristina Gómez, le ha recordado al dirigente de Vox que está imputado por delito de odio por rasgar las fotos de Aurora Picornell el pasado mes de junio en un pleno en el que también acabaron expulsadas del mismo tanto Mercedes Garrido como Pilar Costa.

Cabe recordar que el Parlament debate este martes la enmienda a la totalidad planteada por la izquierda a la derogación que impulsa Vox de la ley de memoria democrática, aunque al no defender ninguno de los grupos proponentes las enmiendas a la totalidad, este punto ha decaído y el pleno ha seguido con el resto de puntos. Ahora, los órganos de la Cámara tienen que estudiar si la derogación seguirá el trámite con el debate de las enmiendas parciales o se puede volver a debatir la enmienda a la totalidad.