El balcón de la Bahía de Cádiz: una joya medieval y uno de los pueblos blancos más hermosos de Andalucía

• Janire Manzanas
• Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.
• • 14/09/2024 19:00
  • Actualizado: 14/09/2024 19:00

La provincia de Cádiz, con su costa adornada por playas de arena blanca y acantilados majestuosos, ofrece un interior igualmente fascinante. Entre sus joyas naturales y localidades pintorescas destaca la Ruta de los Pueblos Blancos, famosa por su belleza y atractivo para el turismo rural. Aunque localidades como Setenil de las Bodegas y Olvera son bien conocidas, Medina Sidonia, situada en un cerro de la Sierra de Cádiz, destaca como uno de los destinos más encantadores de la región. Con más de 3.000 años de historia, alberga un patrimonio arquitectónico impresionante.

La historia de Medina Sidonia se refleja en su castillo, que se alza a 300 metros sobre el nivel del mar y guarda restos de fortificaciones romanas, un alcázar árabe del siglo XI y una fortaleza medieval del siglo XV. Desde el castillo, las vistas panorámicas son espectaculares. Dentro del pueblo, el Arco de la Pastora y la Iglesia de Santa María Mayor La Coronada, con su mezcla de estilos gótico y renacentista, son visitas obligadas. Además, el Puente de los Tres Ojos y una red de galerías hidráulicas subterráneas de más de 20 metros ofrecen un vistazo al pasado romano. Medina Sidonia no sólo es rica en historia, sino que también está rodeada por la belleza natural del Parque Natural de los Alcornocales.

Medina Sidonia

Los primeros asentamientos en la zona de Medina Sidonia se remontan al Bronce Final atlántico, con evidencia de materiales cerámicos y útiles líticos hallados en el cerro de las Madres, sugiriendo una posible conexión con la cultura tartésica. Durante el siglo III a.C., los romanos tomaron el control de la península Ibérica, desplazando a los cartagineses. En el siglo I, se estableció un nuevo núcleo urbano que evolucionó en la ciudad conocida como Asido Caesarina Augusta, un importante centro en la provincia de Bética.

En la era visigoda, la ciudad fue capital provincial y sede episcopal, denominada Asidona. En 712, fue conquistada por los musulmanes y se convirtió en la capital de la cora de Sidonia hasta su saqueo por los normandos. Alfonso X el Sabio la recuperó en 1264, convirtiéndola en una fortaleza en la frontera con el Reino nazarí de Granada. En la Edad Media, Medina Sidonia fue sede de varias órdenes militares y pasó a ser parte del señorío de los duques de Medina Sidonia en 1440. En el siglo XIX, vivió movimientos campesinos significativos.

Lugares de interés

Uno de los principales atractivos es la Iglesia Mayor de Santa María la Coronada, un magnífico ejemplo de arquitectura religiosa del siglo XVI. Su impresionante fachada y decoración interior, que incluye retablos barrocos y una cúpula imponente, reflejan la herencia cultural de la localidad.

Cerca de la iglesia, el Museo Arqueológico de Medina Sidonia proporciona una visión detallada de la evolución de la ciudad con su colección de artefactos que abarcan desde la prehistoria hasta la era moderna.

El Yacimiento Arqueológico de Medina Sidonia, otro lugar imprescindible, ofrece una ventana al pasado con ruinas de la época romana y medieval, incluyendo un teatro antiguo y una necrópolis.

Por otro lado, el Mirador del Cerro del Castillo es ideal. Ubicado en lo alto de la ciudad, ofrece vistas impresionantes del paisaje circundante, desde las colinas hasta el mar en días despejados.

No se puede dejar de mencionar la Plaza de España, el centro vibrante de la vida social de la localidad gaditana, donde se puede disfrutar de la gastronomía local en los bares y restaurantes.

Por último, el Jardín Botánico de Medina Sidonia ofrece un respiro de la vida urbana, con senderos que muestran la flora local y algunas plantas endémicas de Andalucía.

Castillo de Medina Sidonia

Inicialmente, en el siglo III a.C., se construyó un castellum militar romano, cuyas ruinas incluyen gruesos muros de sillares y una serie de torres defensivas. Esta fortificación romana, que dominaba la cumbre del cerro, es única en la península ibérica y refleja la presencia y el poder de Roma en la región.

Durante el siglo XI, bajo el dominio almorávide, se erigió un alcázar árabe, caracterizado por su construcción en tapial, una mezcla de tierra, guijarros y cerámica. Éste nuevo castillo amplió el perímetro defensivo del anterior castellum. Posteriormente, en el siglo XV, el castillo medieval se construyó bajo el mandato del Primer Duque de Medina Sidonia.

Entre los siglos XVI y XX, el castillo sirvió como cantera para extraer piedra para nuevas construcciones en la ciudad, lo que contribuyó a su deterioro. En el siglo XIX, durante la ocupación francesa, se realizaron reparaciones y adaptaciones para usos militares.

Hoy en día, el castillo es un testimonio vivo de la evolución histórica de Medina Sidonia y ofrece a los visitantes una visión fascinante de su pasado a través de sus ruinas imponentes. El horario de visitas varía según la temporada, con precios de entrada de 2,00 € para adultos y gratuitos para menores de 12 años.