6 películas románticas que te harán llorar

El arte evoca emociones, sensaciones, y el cine no es la excepción. De ahí que no es de extrañar que las películas románticas sean de las más exitosas en la historia del Séptimo Arte. Incluso filmes de otros géneros casi siempre llevan incluido algo de romance dentro de sus tramas. Los protagonistas suelen tener un interés romántico que les sirve de inspiración para cumplir con sus cometidos. Bien sea salvar al mundo, detener a un súper villano, o impedir un robo multimillonario.

Ocurre también con los antihéroes. Estos personajes encuentran en el amor una motivación para cometer sus fechorías o reivindicarse ante la sociedad. El mejor ejemplo: Deadpool (Tim Miller, 2016).

Románticas tristes

El amor no garantiza un final feliz. Al menos, no el que la audiencia espera. Por lo que, al no consumarse este ideal, las lágrimas brotan a borbotones de los espectadores. Es el caso La La Land (Damien Chazelle, 2016), cinta que sirvió para que Ryan Gosling y Emma Stone lucieran sus capacidades de canto y baile, además de las histriónicas. (Oscar incluido para la actriz).

Otro filme que explotó el ‘musical romántico’ y que hizo llorar al público fue Moulin Rouge (Baz Luhrmann, 2001). Protagonizada por Nicole Kidman y Ewan McGregor, cuenta una historia de amor imposible dentro de un cabaret parisino. Lo más original de esta cinta, además de su peculiar estética, es que se vale de muchas canciones icónicas de la cultura pop para desarrollar la trama.

Películas románticas para llorar de felicidad

En ocasiones las lágrimas son de alegría. Que los protagonistas consigan vencer todos los obstáculos cuando parecía imposible, también produce catarsis. Uno de los filmes románticos más exitoso de finales del siglo XX fue Notting Hill (Roger Michell, 1999).

Una gran estrella de Hollywood (Julia Roberts) se enamora de un comerciante ordinario de un barrio londinense (Hugh Grant), quien mantiene una fracasada librería de viajes por no tener nada mejor que hacer con su vida. Toda una gesta romántica en plena modernidad.

También ambientada entre libros, pero en Nueva York, Tienes un E-Mail (Nora Ephron, 1998) es otra comedia romántica tan exitosa como ‘lacrimógena’. Tom Hanks y a Meg Ryan se enamoran a través de correos electrónicos, pero no se soportan en la vida real.

Clásicos

Lo que el viento se llevó (Victor Fleming, 1941) y Casablanca (Michael Curtiz, 1942) son dos clásicos imprescindibles. Todos los que se consideren ‘cinéfilos’, tienen que necesariamente ver estos filmes. Con ocho décadas a cuestas, son también de esas películas románticas que te harán llorar, sin que puedas hacer nada por evitarlo.