Mousse de maracuyá: postre fácil sin horno
Es mousse de maracuyá sin horno es un postre muy fácil de preparar que definitivamente debes probar. Aquí tienes el paso a paso.
El mousse de maracuyá es un postre delicioso y lo mejor es que se puede preparar sin horno. Esta fruta además de tener un sabor único, aporta beneficios increíbles para la salud, por lo que es una excelente opción si queremos mantenernos sanos. Para los amantes de los dulces con un toque ácido, esta receta no puede faltar en alguna comida. Es muy rápida de preparar y para nada complicada. Aquí explicaremos el paso a paso para que te animes a probarla. No olvides que esta receta es muy eficaz para que los más pequeños de la casa disfruten del sabor y nutrientes de las frutas.
El maracuyá también es conocido como la fruta de la pasión. Además de ser deliciosa tiene un valor nutricional increíble. Es rica en vitamina A y C, así como en fosforo, potasio y magnesio. Tiene un efecto importante sobre el sueño, debido a su contenido en triptófano, un aminoácido que interviene en la síntesis de melatonina. Se trata de una fruta ideal para recuperar energía luego de una actividad fuerte.
Ingredientes:
- 8 unidades de maracuyá
- 14 gramos de gelatina sin sabor
- 2 tazas de nata o crema de leche
- 1 lata de leche condensada
Para la decoración:
- 2 unidades de maracuyá
Cómo preparar mousse de maracuyá:
- Retiramos la pulpa del maracuyá y la colocamos en una licuadora. Trituramos unos minutos y luego colamos para retirar las semillas negras. Reservamos.
- Mientras tanto hidratamos la gelatina sin sabor. La ponemos en un recipiente con un poco de agua tibia y reservamos.
- En un bol mezclamos la leche condensada con la pulpa de maracuyá que habíamos reservado. Removemos muy bien hasta ambos ingredientes se integren completamente.
- En otro bol colocamos la nata o la crema de leche y batimos con ayuda de un batidor de mano. Mezclamos hasta que llegue a su punto medio.
- Añadimos la mezcla de la pulpa de maracuyá con la leche condensada. También incorporamos la gelatina sin sabor y revolvemos varios minutos hasta obtener una mezcla homogénea.
- A continuación preparamos los moldes que vamos a utilizar. Puede ser uno grande o varios individuales. Vertemos la mezcla con cuidado y cubrimos con papel film transparente o vinipel.
- Llevamos a la nevera y refrigeramos hasta que el mouse cuaje.
- Después servimos y decoramos con un poco de la pulpa de la fruta sobre cada uno.
La combinación de la fruta ácida con el dulce de los demás ingredientes crea un sabor completamente delicioso. Puedes servirlo en cualquier ocasión, nunca te dejará mal.
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