Paneles solares para soportar las consecuencias del cambio climático
Los paneles solares también pueden verse afectados por los efectos del cambio climático que hará aumentar los efectos extremos de la climatología y provocarán que suframos temperaturas más altas, vientos mucho más fuertes o una mayor radiación solar.
Con el actual desarrollo de la industria de las energías renovables, en la Comunidad Valenciana la empresa Silicon Valen ya está impulsando la producción local de paneles fotovoltaicos específicos para soportar estos nuevos escenarios meteorológicos condiciones extremas que conlleva el calentamiento global. Este fenómeno también provoca la concatenación de olas de calor con lluvias torrenciales y vientos huracanados.
Ya es conocido que los módulos fotovoltaicos convierten directamente la luz solar en energía eléctrica, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y disminuyendo la huella de carbono. Las temperaturas extremas que conllevan el calentamiento global han vuelto a ser protagonistas un verano más en nuestro país.
Paneles solares y calor
Por ejemplo, en meses como julio y agosto, en los que se alcanzan temperaturas de alrededor de 40 grados en algunas zonas de España, se suele pensar que las instalaciones fotovoltaicas pueden aprovechar estas condiciones para generar más electricidad, sin embargo hay que tener en cuenta que el calor puede afectar a los paneles solares.
No todos los propietarios de paneles solares saben que la temperatura que sufrimos durante las olas de calor tienen un efecto en la eficiencia de la energía que se genera.
Si hacemos una diferenciación entre la luz, encargada de generar la energía, y la temperatura, se puede decir que llegar a un número de grados extremadamente altos altera el rendimiento de las placas solares.
Disminución de la eficiencia
Pero el mismo sol que nos abrasa es parte de la solución para combatir el cambio climático y alcanzar los ambiciosos objetivos de descarbonización de la UE para 2050 con una reducción de emisiones de entre un 80% y un 95% con respecto a las de 1990.
La solar fotovoltaica es esencial para alcanzar estos objetivos y su generación se ha incrementado este año un 32,9% respecto a la de julio de 2022.
Como normal general, la temperatura idónea a la que las placas solares alcanzan el 100% de su rendimiento, se sitúa entre los 20 y 25 grados. Sin embargo, una vez que se alcanzan más de 35 grados su eficiencia puede disminuir entre un 15 y 20%.
Soportar el cambio climático
Marcos J. Lacruz, presidente de la empresa Silicon Valen, señala que «hemos diseñado un módulo fotovoltaico específico para las condiciones meteorológicas de la Península Ibérica, y que además cuenta con un marco de aluminio reforzado que aumenta la durabilidad del producto y disminuye los riesgos de las instalaciones».
Estas placas solares, específicos para soportar los efectos del cambio climático, pueden mantener una mayor eficiencia en condiciones extremas de calor, lo que significa que pueden generar más electricidad durante los días calurosos.
Esto es especialmente importante en áreas donde la radiación solar es alta y las temperaturas también lo son como en España. Además, estos módulos están mecánicamente adaptados para soportar condiciones de viento extremas, preparados para un otoño e invierno de actividad climatológica adversa como la que los científicos anticipan en la Península Ibérica.
Durabilidad de más de 25 años
Normalmente, los paneles solares tienen una producción garantizada de energía de 25 a 30 años. aunque la mayoría de los paneles solares continúan produciendo electricidad después de este periodo de tiempo. Los primeros 25 o 30 años son considerados como el periodo de vida útil de un panel solar que puede verse acortado por incidencias provocadas por condiciones del tiempo más extremas.
Sin embargo, los paneles solares no necesariamente tienen que durar de 25 a 30 años para amortizar la inversión y ser económicamente viables en el mercado actual.
Innovación española
Desde la empresa afirman que la creación de estos módulos adaptados al cambio climático supone un estímulo a la investigación y el desarrollo en el campo de la energía solar.
Esta circunstancia «puede llevar a avances tecnológicos globales en la eficiencia y el rendimiento de los paneles solares, lo que beneficia a toda la industria solar», según hacen constar desde la compañía.
Silicon Valen destaca que la producción de paneles solares supone un aumento en la creación de empleos locales para la instalación, mantenimiento y fabricación, así como el impulso del crecimiento económico de la zona.
Alcanzar la soberanía energética
La empresa valenciana destaca por ser el primer y único fabricante 100% español de módulos FV «con tecnología propia y perspectivas de desarrollo de toda la cadena de valor, hasta la purificación de silicio de grado solar».
En este sentido, su actividad aspira a contribuir a la soberanía energética de la UE a través de la fabricación integral de módulos fotovoltaicos, con el fin de favorecer la autosuficiencia europea y reducir la dependencia de China en componentes para esta industria.