Cumbre del clima

El nuevo borrador final de la COP28 ya no menciona la eliminación de los combustibles fósiles

La Unión Europea y los ecologistas rechazan el nuevo borrador por ser un texto claramente insuficiente para luchar contra el cambio climático

España rechaza el borrador de la COP28 y señala que es "insuficiente" y que hay elementos "inaceptables"

Borrador final COP28
El borrador final de la COP28 crea malestar en la Unión Europea y los ecologistas
Antonio Quilis Sanz
  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

El nuevo borrador para la declaración final de la 28 Conferencia de las Partes de Naciones Unidad sobre Cambio Climático (COP28)ya está encima de la mesa y en su texto no incluye la mención a una «eliminación» gradual del carbón, el petróleo y el gas.

La cumbre climática, que finaliza este martes en Dubái, ha publicado un documento de 21 páginas en el que tan sólo se menciona una reducción en el consumo y la producción de combustibles fósiles. Esta nueva versión contrasta con la publicada anteriormente en la que la eliminación progresiva todavía se mencionaba como una de varias opciones.

Desde la parte española, la vicepresidenta Tercera del Gobierno y Ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se ha mostrado muy crítica y ha rechazado el texto del borrador final de la Cumbre del Clima de la ONU.

Documento insuficiente

Ribera, no acepta el texto del borrador final presentado por la presidencia de la Cumbre del Clima de la ONU (COP28), que en principio termina este martes en Dubai, y ha señalado que es «insuficiente» y que hay elementos que son «inaceptables».

Ribera ha declarado que la COP28 tiene que convertirse en «un punto de no retorno y en un punto de referencia» en esta década, que ha calificado como crítica. El negociador principal de la UE, Wopke Hoekstra, ha rechazado el borrador, que también lo considera «claramente insuficiente y no adecuado para abordar el problema».

Asimismo, ha recordado que los científicos son «muy claros» acerca de lo que se necesita para abordar el cambio climático. «La eliminación gradual de los combustibles fósiles es una de las prioridades de la agenda de la Unión Europea», ha afirmado para subrayar que existe un vínculo directo entre la eliminación gradual y el objetivo de «sacar a la Tierra y a las personas del peligro».

Inaceptable

«Simplemente no podemos aceptarlo», ha añadido para asegurar que la delegación negociará durante el tiempo que sea necesario ya que este borrador solo ha quedado en una llamada a reducir la producción y consumo de estos tipos de energía.

Por su parte, las organizaciones ecologistas y negociadores se muestran decepcionadas y critican la «rebaja sustancial» de la ambición climática del último borrador presentado por la presidencia del ‘Balance Global’ sobre el que los países deberán negociar para llegar, al final de la COP28, a una manera «justa» y «ordenada» de descarbonizar sus economías y atajar la crisis climática.

Jan Kowalzig, experto en clima de Oxfam, ha calificado el texto de una «redacción muy débil» que se aleja de los combustibles fósiles. Además, otros de los objetivos como triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética no se mencionan como objetivos, sino sólo como una posible medida. «La COP28 no debe terminar así», ha afirmado Kowalzig.

En este sentido, ha advertido de que el objetivo de 1,5 grados Celsius establecido por el Acuerdo Climático de París de 2015 será papel mojado.

Fin de los combustibles fósiles

«A pesar de las garantías en sentido contrario en otras partes del texto», añadió Kowalzig. Kowalzig ha instado a la UE a no apoyar esta declaración y ha advertido de que los países en desarrollo y sus aliados deben exigir mejoras significativas.

La principal crítica de los ecologistas y los países más ambiciosos, con voz y voto en la reunión, radica en la falta de referencias al fin de los combustibles fósiles, asunto que ha centrado buena parte de las discusiones climáticas en la cumbre de Dubái.

Respecto al anterior borrador, que se publicó el pasado día 8, los ecologistas tildan esta nueva propuesta como una «versión descafeinada», un «menú de opciones» que pasa de plantear un calendario para acabar paulatinamente con los combustibles fósiles a ocuparse solamente de la reducción de las emisiones.

Gana el capital fósil

Algunos de los Estados que han sido más exigentes y que han pedido un lenguaje más contundente con referencias explícitas al fin de los combustibles fósiles, como las pequeñas islas -muy amenazadas por el calentamiento global- o países en desarrollo como Colombia, se han mostrado molestos con el nuevo texto.

«Aquí, quien está ganando es el capital fósil», alegó la ministra de medioambiente de Colombia, Susana Muhamad, quien incidió en que lo que se necesita es acabar gradualmente con los combustibles fósiles para reducir las emisiones en un 43 % para 2030, como indica la ciencia.

Con este nuevo borrador «se cede a los intereses de los grandes países que estaban bloqueando, como Arabia Saudí o como los mismos Estados Unidos», señaló también el coordinador de cambio climático de Ecologistas en Acción, Javier Andaluz, quien critica que la nueva propuesta de Balance Global «supone una rebaja sustancial del que conocíamos anteriormente».

“Lo peor es que abre la puerta a falsas soluciones», lamentó Andaluz, puesto que se incluyen las tecnologías de captura y almacenamiento de carbono, así como la energía nuclear, soluciones «que creemos no pueden ayudar a enfrentar la emergencia climática», apostilló.

Aumentar las renovables

En el texto «se habla mucho de la necesidad de aumentar las tecnologías de reducción de emisiones, como si estuvieran al mismo nivel que las renovables y las mejoras de la eficiencia energética, y sabemos que no es así», recalcó la experta en diplomacia climática y directora de Destination Zero, Catherine Abreu.

«Según la ciencia, la tecnología de reducción desempeñará un papel muy limitado», insistió Abreu, y añadió que además se reintroduce la frase de eliminar los subsidios «ineficaces» a los combustibles fósiles.

El responsable de crisis climática de Greenpeace, Pedro Zorrilla, por su parte, coincidió asimismo en las críticas de los otros ecologistas consultados, y agregó que, respecto al transporte, la solución que propone el nuevo texto son «coches de bajas emisiones en lugar de los de cero emisiones que ya existen y que están totalmente desarrollados».

Acuerdo incierto

Desde Dubái el ambiente no es muy positivo ya que se habla de que el texto no vaya a salir adelante tal y como está redactado, pues para ser adoptado deberá contar con el apoyo de los más de 190 países representados en la COP28, donde se toman las decisiones por consenso.

A pesar de que el documento ha sido propuesto por la presidencia de la COP28, su máximo responsable, el sultán de Emiratos Árabes Unidos, Al Jaber, ha pedido «la mayor ambición posible» en el acuerdo de combustibles fósiles.

«Ustedes saben que quiero que tengan la mayor ambición en todos los temas, incluido el lenguaje sobre combustibles fósiles. Si puedo ayudar, mi puerta permanece abierta para todos ustedes. Ya he demostrado lo que puede ofrecer una mentalidad diferente y un enfoque flexible», ha asegurado en un comunicado.

En este sentido, la presidencia de la COP28 ha destacado la «necesidad» de resolver las cuestiones «más difíciles» que «siguen pendientes». «Necesito que todas las partes muestren aún más flexibilidad para llegar a la meta. El mundo está mirando. No descansemos hasta lograr esto», ha afirmado para añadir que todavía hay «mucho por hacer».