El Gobierno construirá la presa de Alcolea, pero pide a la Junta de Andalucía que limpie el cauce
El proyecto lleva paralizado desde el año 2017 por el Estado, con un 21% de ejecución
La presa de Alcolea, un proyecto ubicado en la provincia de Almería, lleva paralizada desde el año 2017, fecha en la que los trabajos dejaron de realizarse por parte del Estado, dejándola al 21% de ejecución.
Con un presupuesto de adjudicación que superó los 89 millones de euros y 246 hectómetros cúbicos de capacidad, la presa de Alcolea se paralizó, primero por problemas de la constructora y, después, por las dudas sobre el nivel de contaminación de los recursos que embalsará.
La subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, ha afirmado este martes que el Estado «está comprometido» en hacer la presa de Alcolea, pero ha subrayado que «hay responsabilidades compartidas» con la Junta de Andalucía y que el Gobierno es «lo suficientemente responsable» para pedir a la administración andaluza «que limpie de ácidos y metales el cauce del Odiel para que esa agua sea apta para el regadío».
Aguas ácidas
Así lo ha manifestado Rico a preguntas de los periodistas antes del inicio de la reunión de la Comisión de impulso de las necesidades en infraestructuras en la provincia de Huelva, donde ha destacado que el Gobierno «no ha descartado» esta presa, pero que hay «cuatro informes, el último es de hoy, de la Universidad de Huelva, diciendo que esas aguas son ácidas, que tienen metales y que no son aptas para el riego».
El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, afirmó en este sentido a finales de febrero que «la presa de Alcolea, lo más importante es asegurar que no hay ningún tipo de contaminación por metales pesados y por carga minera».
El problema está en el cauce del Odiel, muy afectado por los vertidos de numerosas instalaciones mineras abandonadas, desde las que se filtran aguas ácidas y cargadas de metales pesados. Este embalse es una de las principales reivindicaciones hídricas de Andalucía y el pilar que sustenta la prevista expansión de regadíos en Huelva.
Agua tirada al mar
Hace poco más de un año, Moreno urgió al Gobierno a retomar las obras de la presa de Alcolea declarando que se «ha tirado al mar el consumo de Huelva en 2 años», y que, con esta actuación, se pierde un volumen de «22 hectómetros cúbicos».
«Una vez que se arregle, porque tienen que limpiar un 70% de acidez, y no lo digo yo, lo dice un comité de expertos de Huelva después de cuatro informes más que hay en ese sentido, por el CEDES y empresas muy solventes, el Gobierno de España está comprometido, lo ha reiterado en numerosas respuestas parlamentarias, en el Senado y en el Congreso, de que lo va a hacer. Pero el agua tiene que estar limpia, tiene que ser apta para el regadío», ha reafirmado la subdelegada.
Además, la subdelegada ha informado de que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, se va a reunir la semana que viene con el recién constituido gobierno portugués, «con el correspondiente ministro de Portugal» para que «la activación del Bocachanza sea una realidad», algo que «se comprometió con el sector agrario». «Y se están cumpliendo todas las fechas», ha añadido.
Lealtad institucional
Por último, Rico ha manifestado que «confía» en la lealtad institucional de cada administración y en la cooperación «para hacer posible lo necesario y Huelva eso es necesario», por lo que ha enfatizado que el Gobierno «no está renunciando a nada» en la provincia.
«La apuesta del gobierno de España es clara, a nivel hidráulico, a nivel ferroviario, a nivel de carreteras y a todos los niveles, incluido el energético que tenemos todavía que concretar y en esta comisión lo vamos a hacer, el nivel de gigavatios que necesitamos», ha concluido.