La gasolina igual que el tabaco: el Gobierno prohibirá su publicidad
El Ministerio de Consumo prepara una ley que tiene previsto prohibir la publicidad de los combustibles fósiles


El actual borrador de la Ley de Consumo Sostenible que elabora el Ministerio de Consumo incluye prohibir la publicidad de los combustibles fósiles, equiparándolos así al tabaco, a fin de combatir el ecopostureo.
Una decisión que no es novedosa a nivel estatal y que tiene un modelo ya en marcha a nivel municipal. La ciudad de La Haya (Países Bajos) se convirtió el pasado mes de enero en la primera ciudad del mundo en prohibir la publicidad en su paisaje urbano referente a combustibles fósiles y servicios y productos con uso intensivo de carbono, como viajes aéreos y cruceros.
De este modo, la publicidad de billetes de avión, pero también de coches híbridos, por ejemplo, estará prohibida a partir del 1 de enero de 2025, según han decidido las autoridades de la ciudad holandesa.
No a la publicidad fósil
Esta norma del municipio holandés también afecta a la publicidad de productos y servicios relacionados con los combustibles fósiles como las vacaciones en avión, los vehículos de gasolina y los proveedores de gas.
En 2024, el Ayuntamiento de Edimburgo también decidió prohibir los anuncios de «productos con alto contenido en carbono» en espacios de propiedad municipal, como vallas publicitarias y paradas de autobús.
Siguiendo el ejemplo de Francia
A nivel estatal, esta decisión también tiene su reflejo a nivel europeo. De este modo, Francia fue el primer país en prohibir los anuncios de combustibles fósiles en 2022, pero de una forma más débil que aún permite los anuncios de gases fósiles y los anuncios en el contexto del patrocinio de eventos.
Norma española
Según el proyecto del Gobierno español, la norma tiene por objeto «la transposición de las Directivas de Empoderamiento y Derecho a reparar, así como la regulación de diversas materias que ahondan en un consumo sostenible de bienes y servicios».
El borrador pretende luchar contra el ecopostureo (greenwashing en inglés) con una serie de medidas, como la prohibición de publicidad de los combustibles fósiles.
En el texto se describe que desde hace varios años, el impacto que está teniendo en la sociedad el incremento del calentamiento global ha provocado que desde diversos sectores se reclamen medidas legales para vetar la publicidad de los combustibles fósiles, responsables de la crisis climática, similares a las que se introdujeron a nivel europeo para el tabaco hace dos décadas.
Productos energéticos fósiles
Según el borrador de la nueva ley, «se prohibirá cualquier tipo de publicidad dirigida a personas consumidoras sobre productos energéticos compuestos exclusivamente por derivados de origen fósil, sin participación de componentes renovables, cuando sea emitida por empresas del sector del carbón o del petróleo». Se excluye de esta prohibición el gas.
Entre otras medias contempladas figura el veto a realizar afirmaciones genéricas del tipo «respetuoso para el medioambiente», «amigo del medio ambiente», «verde», «bueno para la naturaleza» o «inocuo en términos de carbono».
También el texto describe que se dotará de mayor credibilidad a las etiquetas de sostenibilidad, que deberán basarse en sistemas de certificación, según detalla. Se prohibirá presentar los requisitos legales impuestos a todos los productos de una misma categoría como si fueran una característica distintiva de la oferta del comerciante.
No a los programas de compensación
La futura legislación vetará también las afirmaciones a nivel de producto basadas en la compensación de emisiones de gases de efecto invernadero y las empresas no podrán indicar que un producto tiene un impacto medioambiental neutro, reducido o mejorado basándose únicamente en programas de compensación.
Según el borrador, estará prohibido realizar una afirmación medioambiental sobre la totalidad del producto o sobre toda la empresa cuando sólo se refiera a un determinado aspecto del producto o a una actividad específica de la empresa.