Una Formentera más verde enfriaría la isla bajando su temperatura entre uno y tres grados
Presentan Living Formentera, una iniciativa pionera que busca recuperar la biodiversidad perdida y las tradiciones en la isla
El proyecto cuenta con un modelo de financiación innovador basado en créditos de biodiversidad para facilitar la implicación público-privada


La tendencia al alza de las temperaturas a nivel global preocupa y mucho. Una situación de la que no se escapa el área del Mediterráneo, un entorno con aumentos de temperaturas mucho más acusados que afectan a sus habitantes y al sector turístico, una de sus principales fuentes de ingresos.
Las islas Baleares también sufren este efecto del cambio climático y muestra de ello es la preocupación que mantiene en alerta a las islas Pitiusas que ha activado un plan para enfriar una de sus ínsulas.
El plan consiste en recuperar la biodiversidad de la isla de Formentera para reducir la temperatura todo su territorio en al menos 1 ⁰ C y hasta en 3 ⁰ C las zonas residenciales.
Living Formentera
El proyecto Living Formentera: The Coolest Islands Invest in Biodiversity es una iniciativa pionera que busca convertir a la isla balear en líder mundial del turismo sostenible mediante una inversión estratégica en biodiversidad y la recuperación de las tradiciones perdidas de la isla.
El proyecto nace del diagnóstico de la biodiversidad de Formentera, que refleja que la cobertura arbórea actual es inferior al 10% en áreas urbanas, donde más impactan los efectos del cambio climático.
Actualmente, la isla cuenta con aproximadamente 2 millones de árboles y 30 millones de arbustos, lo que representa una cobertura arbórea del 19%, pero que en áreas urbanas se reduce por debajo del 10%.
Cómo enfriar una isla
Como adelantábamos, Living Formentera busca enfriar la isla un 1 ⁰ C, mitigando el efecto isla de calor en áreas urbanas en hasta 3 ⁰ C. Todo ello sin olvidar que hay que «mejorar la calidad del suelo y la capacidad de retención de agua en al menos el 10% de la isla, e incrementar la cobertura verde de la isla en alrededor del 22% de su superficie durante un periodo no inferior a 20 años», afirman sus impulsores.
Para ello, el proyecto estima ampliar el stock de vegetación en zonas forestales, tierras abandonadas y tierras urbanas y periurbanas, con especies autóctonas de Formentera como sabinas, cultivos tradicionales (higueras, almendros, algarrobos, vides y olivos) y otras especies (jacarandas y cinamomos).
Destacan desde el proyecto que «la isla apenas retiene un 42% de su vegetación primaria y muchos de los cultivos tradicionales se han perdido. Eso supone que el efecto enfriamiento que proporciona la vegetación es al menos 1 ⁰ C inferior al de Mallorca, Menorca o Ibiza».
Más árboles y arbustos
Para mitigar estos efectos, Living Formentera propone aumentar la vegetación con 475.000 árboles autóctonos y 6.000 arbustos. «Esto permitirá reducir el efecto isla de calor, proteger e incrementar su biodiversidad, y reintroducir cultivos tradicionales y autóctonos de Formentera», recalcan los autores del proyecto.
Fuentes del proyecto apuntan a OKGREEN que «en los próximos meses se iniciarán las primeras plantaciones. Ahora sé está trabajando en el engagement con la comunidad local». Sobre la duración de esta innovadora iniciativa, comentan a esta redacción que «al ser pilotos iniciales, no se puede determinar la fecha de finalización del proyecto».
La presidenta del Govern Balear, Marga Prohens, ha agradecido que se haya elegido las Islas Baleares para llevar a cabo este proyecto y ha señalado su «apoyo a iniciativas que no solo protegen nuestro entorno, sino que también fomentan la innovación y refuerzan nuestra identidad como destino responsable».
Combatir el cambio climático desde la raíz
El presidente del Consell de Formentera, Óscar Portas, ha indicado que este proyecto marca un antes y un después, indicando que «estamos hablando de multiplicar el verde, de combatir el cambio climático desde la raíz, de invertir en calidad de vida. De generar beneficios ambientales y sociales tangibles: menos calor, más sombra, mejor aire, más salud».
Para el presidente de Nature & People Foundation, Juan Costa, «la economía global no crecerá si no empezamos a invertir ya en biodiversidad. Ha llegado el momento de repensar el progreso y recuperar todas aquellas actividades tradicionales que contribuían a la preservación de la biodiversidad y la sostenibilidad».
Vegetación como activo financiero
El proyecto Living Formentera requiere una inversión de alrededor de 20 millones de euros para incrementar el stock de vegetación. Esto podría generar beneficios ecosistémicos por valor de hasta 90 millones de euros anuales, una vez que la vegetación alcance un cierto desarrollo. Los análisis preliminares apuntan que por cada euro invertido en la isla se obtendrá un retorno de más de 50 euros.
El plan propone un mecanismo innovador: la creación de créditos de biodiversidad urbana (UBC) utilizando el Urban Biodiversity Standard (UBS) desarrollado por Nature & People Foundation. Formentera será la primera isla en poner a prueba esta iniciativa novedosa con la que se pretende implicar al sector privado en la estrategia de repoblación.
El proyecto ha sido coordinado por EverTree, con el apoyo del análisis satelital con inteligencia artificial de Agforest, Mishcon de Reya e IbizaPreservation y ha sido presentado hoy contando con la participación de la presidenta del Govern Balear, Marga Prohens; el presidente del Consell de Formentera, Óscar Portas y el presidente de Nature & People Foundation, Juan Costa, entre otros representantes institucionales y empresariales.
Promover la biodiversidad urbana
Nature&People Foundation es una organización sin ánimo de lucro con sede en el Reino Unido, dedicada a promover la biodiversidad urbana, conectando la conservación de la naturaleza con el desarrollo urbano.
Mediante el fomento de asociaciones público-privadas y el establecimiento de un mercado de créditos para la biodiversidad, la fundación posiciona la biodiversidad como un componente básico del desarrollo urbano sostenible.
Esta metodología combina un profundo conocimiento de la biodiversidad urbana, la investigación científica de vanguardia y técnicas avanzadas de detección por satélite, dando como resultado una cartera de Créditos de Biodiversidad Urbana diseñada para atraer inversión privada destinada a financiar iniciativas de naturaleza urbana.