Agua

Inteligencia artificial geoespacial y algoritmos conscientes para alcanzar la sostenibilidad

Agforest ofrece soluciones basadas en datos geoespaciales e inteligencia artificial para ayudar a empresas e instituciones del sector púbico a transitar hacia una economía regenerativa

Invertirá 6 millones de euros en I+D+i en inteligencia artificial geoespacial para la sostenibilidad hasta 2028

inteligencia artificial geoespacial
Antonio Quilis Sanz
  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

La gestión de residuos, la contaminación y el agua, así como el análisis de los riesgos que ponen en peligro el equilibrio de los límites planetarios, son los principales desafíos a los que se enfrentan las ciudades y el sector agrícola, unos retos que se pueden monitorizar con inteligencia artificial geoespacial.

Con este propósito nació Agforest, que se define como «una startup pionera en la aplicación de inteligencia artificial geoespacial (GeoIA) regenerativa para construir un futuro sostenible».

Una actividad que realiza la empresa, fundada en Málaga en 2021, y que ha anunciado que invertirá 6 millones de euros en I+D+i hasta 2028 en su sede tecnológica de Málaga para el sector de la sostenibilidad.

Para entender su actividad, con esta tecnología se detectan islas de calor en las ciudades, la presencia de amianto en los tejados, monitorizar la calidad el aire o detectar sumideros de carbono, entre otras muchas actividades.

Soluciones de GeoIA

Estos datos se desprenden del plan de crecimiento de la compañía, que alcanzará una facturación de más de 1 millón de euros en 2024, lo que representa un crecimiento de más de un 400 % respecto a 2023.

Con su propuesta de inteligencia artificial geoespacial, en tan solo un año de actividad, la empresa ha logrado superar su break even en términos de facturación, con 300.000 euros vendidos en soluciones de GeoIA», tal y como anuncian sus responsables.

La compañía afirma que contempla incrementar su facturación hasta llegar a los 12 millones de euros en 2028 debido al «auge de la legislación en materia de sostenibilidad impulsará el valor de su tecnología en el mercado en los próximos cuatro años, respondiendo a las necesidades del sector privado y la Administración pública».

Mercado de la sostenibilidad

La tecnología desarrollada por Agforest se enmarca dentro del ecosistema cleantech, como una startup orientada al desarrollo de tecnología verde. La empresa destaca que, a nivel global, «se estima que este mercado supere los 18.000 millones de dólares en 2024».

Para respaldar estas cifras, recurre a los expertos afirmando que «esta cifra se incrementará hasta superar los 80.000 millones de euros en 2032. Este pronóstico se traduce en una tasa interanual compuesta del 19,7 %».

Para afrontar este reto, desde Agforest informan de la presentación de «un ambicioso plan de internacionalización para Europa, Reino Unido y Latinoamérica (LATAM)».

Todo gira en torno a la aprobación de una nueva Directiva Europea sobre la información de sostenibilidad en las empresas (CSRD), la compañía pone el foco en los 27 estados miembros de la Unión Europea (UE) para comenzar a exportar sus soluciones en 2024. Así mismo, la empresa reseña que ha impulsado proyectos y negociaciones en México (LATAM) y Londres (Reino Unido).

Equipo Agforest
Foto del equipo de Agforest

Algoritmos «conscientes»

Desde la empresa muestran datos como que «en 2020 la masa de los objetos creados por el ser humano superó por primera vez en la historia a la masa de toda la materia viva de la Tierra».

De este modo se presenta para «ofrecer soluciones que permitan revertir esta situación, devolviendo a la naturaleza su autonomía para regenerar los recursos limitados de los que disponemos».

La compañía aplica su tecnología en tres áreas de negocio: la gestión de residuos y contaminación; la gestión de recursos hídricos y un área transversal con foco en el análisis de riesgos ambientales, económicos y biodiversidad.

Datos geoespaciales

Para ello, Agforest apuesta por el I+D+i que combina los datos geoespaciales con la inteligencia artificial. La compañía aplica modelos predictivos y analíticos basados en algoritmos de IA a datos geoespaciales obtenidos mediante imágenes por satélite, sondas o sensores, entre otros.

De este modo, ha desarrollado algoritmos alineados «con los valores humanos para ayudar a las empresas e instituciones de todo el mundo a impulsar la transición hacia una economía regenerativa».

«La explotación de los recursos naturales es responsable de la pérdida del 90 % de la biodiversidad, causando un gran impacto climático. En Agforest estamos convencidos de que la GeoIA, aplicada desde el punto de vista regenerativo, será la piedra angular para lograr la transición hacia una economía circular y regenerativa. El futuro de la tierra está en juego y la tecnología será una gran aliada para revertir esta situación», explica Pablo Quesada, Chief Technology Officer (CTO) y cofundador de Agforest.