Agua

Diez claves sobre el agua que deben conocerse en las aulas

AEDyR elabora un decálogo para concienciar sobre la importancia de utilizar racionalmente los recursos hídricos

Agua aulas
La educación ambiental en las aulas es uno de los mejores vehículos para promover la concienciación ambiental y conocer la importancia del agua

¿Qué deben conocer sobre el agua los estudiantes en las aulas? ¿Qué se debe enseñar en ellas sobre este elemento para concienciar a los alumnos sobre su importancia?

Con motivo del Día Mundial de la Educación Ambiental, la Asociación Española de Desalación y Reutilización de Agua (AEDyR) ha elaborado un decálogo, con las claves que considera que se deben enseñar desde los primeros niveles de la educación.

Estamos ante uno de los periodos más alarmantes de sequía en España en el que el cambio climático es el factor fundamental que está provocando que ríos, embalses y los campos acusen esta escasez por la falta de lluvias. El enseñar y dar a conocer muchos de los procesos a los que está sometida también contribuirá a su correcta utilización.

Concienciación en las clases

La educación ambiental en las aulas es un fantástico vehículo para promover la concienciación desde la base de la sociedad, dar a conocer valores que se propagarán seguramente más allá de las aulas.

Esta iniciativa tiene como objetivo el concienciar a la sociedad sobre la importancia de utilizar racionalmente los recursos hídricos y las distintas técnicas para aprovecharlos, como la desalación y la reutilización, y así contribuir a la economía circular.

Diez claves para apreciarla

Entre las diez claves para el mensaje de la importancia del agua llegue a las aulas se resalta es un recurso escaso que se debe aprovechar al máximo, las tecnologías, la depuración, su potabilización o, en el marco de la economía circular, su reutilización.

  1. Agua potable, un recurso escaso. Sólo un 2,5% del agua de la Tierra es dulce. El 97,5% restante contiene gran cantidad de sales que impiden que pueda ser utilizada directamente para el consumo humano, la agricultura, la industria o la limpieza de espacios públicos.
  2. Tecnología. Para conseguir aprovechar mejor este recurso, se han desarrollado tecnologías que permiten extraer las sales e impurezas del agua y que pueda ser utilizada en todos los usos que necesitamos los humanos.
  3. Desalación: Eliminando el exceso de sales del agua de mar en las desaladoras, se consigue transformar en agua potable para que llegue a nuestros grifos lista para consumir.
  4. Técnica de membranas. Las sales del agua del mar se extraen a través de unas membranas de ósmosis inversa. Cuando se hace pasar el agua de mar a través de estas membranas, se obtienen dos corrientes de agua: una con un contenido de sales bajo, el permeado, que dará lugar al agua potable, y otra corriente de agua de mar concentrada, la salmuera, que se devuelve al mar.
  5. Potabilización. La mayoría del agua dulce, que es la que contienen ríos, lagos y acuíferos, tampoco puede ser consumida directamente, debe ser tratada para eliminar gérmenes u otras sustancias nocivas para la salud. Esa función la realizan las potabilizadoras.
  6. Depuración. Una vez que el agua es utilizada y sale por el desagüe, viaja hasta las depuradoras, donde se eliminan las sustancias que contiene que pueden perjudicar al medio ambiente y a los seres vivos.
  7. Reutilización. Para poder volver a ser usada, el agua que ha pasado por las depuradoras es sometida a procesos de limpieza más avanzados, tras los cuales puede ser reutilizada para los usos habituales. La reutilización es la contribución del sector a la economía circular.
  8. Usos del agua reutilizada. En España la legislación no permite consumir agua reutilizada, aunque sí es posible en otros lugares del mundo como California o Singapur, por ejemplo. Pero sí está permitido utilizarla para la agricultura, la jardinería, la industria o la limpieza urbana.
  9. Escasez de agua. Cada vez hay mayor escasez de agua en el planeta, debido al cambio climático, que provoca temperaturas más elevadas y lluvias más irregulares, al tiempo que aumenta la población. Esta falta de agua y las sequías hacen necesario usar más agua desalada y reutilizada.
  10. Todos podemos aportar nuestra gotita de agua. La escasez de agua es un problema que nos afecta a todos y, por tanto, es responsabilidad de cada persona preservarla, hacer un uso racional de ella y no desperdiciarla.