Dieta alimentaria

Dieta verde y ejercicio físico en la naturaleza, algunos de los secretos para alargar nuestras vidas

El profesor Manuel de la Peña recomienda "pensar en verde" para revertir el envejecimiento y mejorar la esperanza de vida

Dieta
El Dr. Manuel de la Peña es presidente del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social.

Alcanzar una mayor esperanza de vida no sólo depende de los factores genéticos, también está intrínsicamente relacionada con los hábitos que llevamos en nuestro día a día. La dieta con productos saludables y orgánicos, el contacto con la naturaleza, el realizar ejercicio físico en un entorno natural y cambiar nuestro entorno también son factores que se presentan como las claves para ser más longevos.

En este sentido, el profesor Manuel de la Peña, director de la Cátedra del Corazón y Longevidad y presidente del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social, se muestra convencido de que en 2045 viviremos al menos hasta los 120 años.

Pensar en verde

Para alcanzar esta edad, el cardiólogo considera que la dieta verde y el ejercicio físico, son dos buenos antídotos contra el envejecimiento, defendiendo la teoría de que la clave está en «pensar en verde».

El concepto que defiende el profesor, gira en torno a realizar una dieta rica en proteínas vegetales, basada en muchas verduras, legumbres y frutas, con cereales integrales.

Desde su dilatada experiencia recomienda un puñado de frutos secos al día, todo tipo de pescados, especialmente azules (boquerones, sardinas, salmón…) y el consumo moderado de carnes magras.

Otro de los factores importantes a tener en cuenta es el de «huir de los ultras procesados y hacer una alimentación basada en productos orgánicos, así como tomar 3-4 cucharadas diarias de aceite de oliva virgen extra».

Ejercicio y naturaleza

Además, el doctor De la Peña considera que es vital realizar ejercicio físico en contacto con la naturaleza y, afirma, que «unas buenas caminatas diarias por espacios verdes de al menos 20 minutos aportan unos grandes beneficios para la salud».

El verdadero paradigma son los cerca de un millón de supercentenarios que viven en las denominadas «zonas azules», en las que se constatan los efectos positivos sobre la salud al vivir en entornos verdes. De la Peña añade que «tan sólo contemplar la naturaleza, tiene un efecto relajante que reduce el estrés, disminuye nuestra sobrecarga mental y nuestro riesgo de enfermedad cardiovascular».

No sólo está el comer correctamente con una dieta verde y el cuidar nuestro cuerpo. El doctor es también partidario de mirar el entorno en el que nos desenvolvemos y vivimos. Defiende que hay que pensar las intervenciones urbanísticas en las ciudades que se diseñen con este pensamiento verde y crear espacios que acojan y eviten la contaminación para fomentar vidas saludables.

Más vegetación en las ciudades

Las claves están en desarrollar zonas urbanas con parques llenos de árboles y plantas, que «son auténticos seres vivos que fomentan el bienestar global de la población que los disfruta», señala el profesor. En este sentido recuerda el estudio publicado por la Universidad de Harvard demostró que las personas que estaban rodeadas de vegetación vivían más tiempo y tenían menos probabilidad de sufrir enfermedades.

Afirma que, de hecho, «las personas longevas son aficionadas a la jardinería y los que la practican obtienen beneficios para su salud física y mental y estarán menos estresados».

Así mismo, el doctor señala, además de la dieta verde y del ejercicio, la importancia que tiene la incorporación de las plantas en la arquitectura de interiores, tanto de oficinas como en nuestras propias casas. En este sentido, estudios realizados por la NASA constatan que determinadas plantas tienen un efecto purificador del aire.

La hiedra, los ficus (robusta y benjamina), las drácenas, el crisantemo, el poto y el bambú, entre otras, tienen un efecto beneficioso, ya que, además de absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno a través de la fotosíntesis, ayudan a eliminar contaminantes como el benceno, formaldehido, trocloroetileno, xileno y tolueno.

Consejos verdes de la mano de un experto

Todos estos consejos vienen de la mano de un auténtico experto como el profesor De la Peña que es académico, profesor de cardiología, Cum Laude en medicina y escritor. Entre sus múltiples reconocimientos están el haber  sido galardonado con la Insignia de Oro de la Asociación de Pacientes Coronarios (APACOR) y con la Medalla de Bronce de la Sociedad de Estudios Internacionales (SEI).

La importancia del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social, del que Dela Peña es presidente, proviene de que es una institución independiente, en la que han participado Premios Nobel, ministros de distintos signos políticos y diputados del Parlamento Europeo, entre otros.