Cruz Roja alerta de la presencia de microplásticos en el 100% de ríos y mares
Los elementos predominantes provienen principalmente de tejidos sintéticos y cuerdas, presentes en entornos urbanos, agrícolas e industriales.
Cruz Roja y la Asociación Hombre y Territorio (HyT) han analizado el agua de 11 ríos y 7 playas para conocer la cantidad de microplásticos que afectan a nuestros medios acuáticos.
El resultado es desesperanzador y preocupante ya que en los análisis se han detectado indicios de contaminación por fibras, fragmentos, films, esponjas o esferas plásticas, entre otros, en el total de muestras recogidas en el terreno por los voluntarios de esta entidad.
Cruz Roja, además, alerta de que todos los ecosistemas acuáticos de España se encuentran expuestos a la llegada de microplásticos, que pueden ser ingeridos directa o indirectamente por las personas, con consecuencias para la salud por su propia ingesta o la liberación de los aditivos químicos de los que están compuestos.
Presencia global
Este material aparece en ecosistemas acuáticos como ríos, embalses, lagunas, aguas subterráneas y de consumo, pero incluso se está viendo que muchas de las fibras de la ropa sintética están en suspensión, es decir, también las respiramos y tragamos.
Las dos entidades recuerdan que «se estima que cerca de 10 millones de toneladas de basura llegan al océano cada año, siendo cerca de un 80% de origen plástico; sin embargo, los ecosistemas terrestres están menos estudiados, y eso que el 80% de la basura que llega al mar proviene de la tierra».
Este proyecto de seguimiento de la salud de nuestros medios acuáticos, iniciado en 2021, ha evolucionado hasta convertirse en una red de seguimiento que proporciona datos cruciales, según explica Cruz roja. Además, busca el concienciar a la sociedad sobre la magnitud del problema que, por primera vez, todas las muestras recogidas contienen microplásticos.
¿Qué son los microplásticos?
Los microplásticos son pequeñas partículas de plástico que miden menos de 5 milímetros de diámetro y que se generan a partir de la fragmentación y descomposición de objetos de plástico más grandes, como botellas, bolsas y envases.
También pueden generarse a través de la liberación directa de productos de cuidado personal, como exfoliantes y cremas. Los microplásticos pueden encontrarse en el agua, el suelo, el aire y en la cadena alimentaria.
Cruz Roja detalla que los microplásticos provienen desde el desgaste de los neumáticos de un coche, hasta las fibras que se encuentran en las colillas de los cigarros, o los trozos que se desprenden de los desechos plásticos.
Un cambio en el estilo de vida
Contrario a la percepción común centrada en fragmentos o pélets, el estudio resalta que, en estas muestras, los elementos predominantes provienen principalmente de tejidos sintéticos y cuerdas, presentes en entornos urbanos, agrícolas e industriales.
Pese a que esté extendida esta presencia en el agua, «no debería ser normal ni debemos normalizarlo, ya que puede afectar a la salud de las personas», aseguran desde Cruz Roja.
Aunque aún se están estudiando los efectos de la ingesta de estas sustancias en el cuerpo humano, se debería de modificar nuestro estilo de vida para dejar de contaminar las aguas, y reducir esta presencia en la medida de lo posible.
La forma en la que vivimos es la consecuencia de este aumento de microplásticos en el agua, «lo que consumimos, cómo vestimos, lavamos la ropa o los platos afecta a la aparición de estos residuos en el agua a través de los desagües, que llegan a ríos y mares», señala Paloma García, técnica de Medio Ambiente de Cruz Roja.
Red de seguimiento de microplásticos
A lo largo de 2021, 2022 y 2023 se desarrolla la acción coordinada entre Cruz Roja y HyT cuyo objetivo es la organización, formación, muestreo y análisis de microplásticos tanto en ríos como en zonas costeras en distintos puntos de España, a través de una red de seguimiento organizada. Esta iniciativa se enmarca dentro de las alianzas que cada entidad presenta con el Proyecto Libera.
Desde el inicio de este proyecto, se han analizado ríos de Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Ceuta, Comunidad Valenciana, Euskadi, Galicia, La Rioja, Madrid, Murcia y Navarra. Y playas de Andalucía, Cantabria, Ceuta, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Canarias y Murcia.
La red de muestreo de ecosistemas acuáticos es un proyecto de «ciencia ciudadana», donde el voluntariado de Cruz Roja participa recogiendo muestras después de recibir formación y materiales.
Tipos de microplásticos
Los datos se recopilan de manera estandarizada y científica, con protocolos específicos. La fiabilidad de los resultados es respaldada por la revisión de especialistas y técnicos científicos, en este caso de HyT, que tiene más de cinco años de experiencia en este aspecto.
Tras la identificación se observan cómo los elementos tipo fibras son los más representados (67% en ríos, 73% en mares), seguidos de los de tipo fragmento (22% en ríos, 23% en mares), mientras que la tipología films, esponjas y esferas se han identificado en menores ocasiones (entre 1% y 3%).
Los datos obtenidos en los muestreos se encuentran además en el repositorio web MICRO, con el fin de difundir los resultados obtenidos y poner el valor el trabajo realizado por Cruz Roja.
Así mismo, la entidad expone «la falta legislación que impida la aparición de nuevos microplásticos en el ambiente, ya que habría que evitar materiales plásticos que puedan romperse o dejar residuos en aquellos lugares donde hay contacto con el agua (desde la cubierta de un barco, hasta la industria textil, etc.)».
Cómo reducir los microplásticos
Acompañando al estudio, Cruz roja da distintos consejos para contribuir a la reducción de microplásticos en la vida cotidiana, reclamando que «es esencial adoptar prácticas conscientes y sostenibles».
- Opta por reducir y reutilizar más veces el uso de elementos plásticos, como bolsas, botellas y utensilios desechables. Elige productos con envases minimalistas y elige opciones a granel siempre que sea posible.
- Al lavar la ropa, considera utilizar filtros de microplásticos en tu lavadora o elegir tejidos naturales en lugar de sintéticos, ya que estos últimos liberan fibras durante cada lavado. Si son sintéticos, elige tejidos y prendas duraderos, de calidad, para reducir la necesidad de reemplazos frecuentes.
- Además, evita productos de cuidado personal que contengan microesferas plásticas, optando por alternativas naturales.
- La educación ambiental y la divulgación de estas prácticas en el entorno pueden marcar la diferencia al crear una conciencia colectiva sobre la importancia de preservar nuestro ecosistema y reducir la presencia de microplásticos en nuestro día a día.