Nuevos límites de velocidad en España: Europa está presionando para el cambio

En las normas viales europeas, lo cierto es que el debate sobre las limitaciones de velocidad en las autopistas y también de las autovías ha ido creciendo en estos últimos meses.

Según varios países de la Unión Europea han ido revisando las políticas al respecto, en el caso español, está en un momento en el que deben tomar decisiones sobre la manera en que se circula por las carreteras.

Las presiones en Bruselas y en el entorno de Europa son importantes, con una gran diferencia entre las velocidades máximas que se permiten en el continente.

El caso alemán

Si hablamos del país teutón, lo cierto es que la famosa Autobahn ha terminado siendo un símbolo de libertad para los conductores, puesto que permiten velocidades sin restricciones en varios tramos.

El caso es que esta forma de actuar ha terminado siendo objetivo de grandes debates sociales con una parte importante de la población y de los legisladores, que han presionado de cara a establecer unos límites bastante más estrictos.

Si vamos al extremo más opuesto de este espectro, hay países bálticos como Estonia, que lo que han hecho ha sido opta por la imposición de un límite máximo de 90 km/h en las autopistas, de tal forma que se ha subrayado una orientación hacia una seguridad vial mucho más conservadora.

En otros países como Suiza, lo que ha sucedido es que las autoridades dieron un paso más allá, puesto que se propuso una reducción todavía más drástica.

Desde 2026, este país busca la limitación de la velocidad máxima a ochenta kilómetros por hora en toda su red vial, algo que puede parecernos muy radical, pero que la quieren ajustar dependiendo de la época del año, así como de las condiciones del tráfico.

Esta clase de medidas quieren subrayar los distintos enfoques que se consideran en el viejo continente, donde no existe el verdadero consenso sobre qué estrategia es la mejor de cara a un equilibrio entre la seguridad y la eficiencia en la carretera.

Límites de velocidad españoles

En nuestro país, podemos decir que nos encontramos ante un punto medio con un límite máximo de ciento veinte kilómetros por hora, en buena parte de autovías y autopistas.

Lo cierto es que dicho umbral ha sido constante, de tal forma que se ha alinado con países como Chipre, Noruega o Suecia, que cuentan con límites que están entre cien y ciento diez kilómetros por hora.

Tanto Italia como la República Checa pueden ejemplificar el caso de los países que han tomado la decisión del aumento de los límites de velocidad en algunos tramos de autopistas.

En el caso particular checo, el límite pasa de ciento treinta a ciento cincuenta desde 2026 en adelante. La administración checa la justificó en base a que, tanto las infraestructuras como los actuales vehículos están listos para poder soportar las velocidades más elevadas sin que se comprometa la seguridad.

Italia continúa semejante camino, puesto que se ha propuesto el aumento de la misma velocidad en algunos tramos concretos de autopistas, siempre y cuando se consideren seguros y con la mejor visibilidad.

Cambios en España

En Europa hay una tendencia a que se aumenten los límites de velocidad, pro la DGT se inclina más a una opinión más conservadora y que busca, ante todo, la seguridad.

En el mandato de Pere Navarro, el tráfico implementaron medidas como la reducción de la velocidad máxima en bastantes calles a 20 y 30 km/h, además de eliminar el margen de 20 km/h que está permitido para el adelantamiento en carreteras secundarias.

Un contexto español donde hace dos años, el treinta por ciento de los fallecidos en accidentes de tráfico se vieron inmersos en golpes donde la velocidad tenía un importante papel.

El caso es que no se puede descartar que España aumente los límites. En nuestro país, la legislación posibilita llegar a 150 km/h en las vías de elevada capacidad cuando haya una serie de situaciones como hacer pruebas o experimentos con coches, así como que se use la señal V12 como dice el artículo 47 del Reglamento General de Vehículos.

Una decisión complicada

El sentido común, como ya han hecho en algunos países europeos dice que es se deben aumentar los límites de velocidad en las vías donde es posible hacerlo, aunque España mantenga la cautela y priorice la seguridad en este sentido.

Lo que no podemos descartar es que la presión en Europa nos puede llevar a cambios importantes en un futuro próximo, que haga que se altere el panorama en las vías españolas en profundidad.

De todas formas, en OkDiario os seguiremos informando de todas las novedades que se produzcan a este respecto y que esperemos sirvan para la mejora de la seguridad vial y una reducción de accidentes, algo donde también importan y mucho las condiciones de las carreteras.