No tiene mucho misterio pero no es lo que tu creías: así es cómo sabe Google Maps cómo está el tráfico en tiempo real

Las apps de navegación como sucede con Google Maps valen para bastante más que evitar que podamos perdernos. Por lo tanto, son una herramienta de gran efectividad para poder saber qué velocidad es la que marca la vía o para saber si hay radares.

Existe otra feature que puede ser importante para una gran experiencia al volante, donde se ha elegido la ruta y evitando los atascos o armarnos de paciencia de cara a soportar la duración estimada de dicho embotellamiento, pero ¿cómo puede saber Google Maps cómo se encuentra el tráfico en tiempo real?

Debes abrir la aplicación de Google, añadir el destino y de manera automática vas a recibir los datos como las rutas disponibles posibles y cuál va a ser la mejor, el tiempo que habrá para el viaje, el tráfico y su densidad, así como el tiempo estimado para la llegada.

Hablamos de mucha información de golpe que cuenta con bastante trabajo detrás y donde la precisión es fundamental.

Con la información que le proporcionan los usuarios

La propia Google, lo que ha hecho es explicar en su blog, los datos de tráfico en tiempo real que va a obtener con los propios usuarios. No te olvides que cada vez que abras la aplicación, le estarás dando información de dónde te encuentras.

La información que se analiza en conjunto lo que posibilita es comprender las condiciones de tráfico existente en las carreteras de todo el planeta.

Lo que ocurre es que tiene en cuenta la forma en la que va a cambiar la situación del teléfono en el tiempo y si dicha variación va a ser más lenta de lo habitual.

Por todo ello, los datos basados en la velocidad y el número de teléfono posibilitan el determinar si te encuentras en un atasco.

Con los datos históricos y el famoso machine learning

No hablamos de la única herramienta para conseguirlo, puesto que este tipo de información no va a ser suficiente para poder determinar la propia evolución de los flujos de las vías con el pasar del tiempo.

Para conseguirlo, lo que hace es tirar del análisis de patrones históricos de las carreteras a lo largo del tiempo.

Si se quiere entender, lo que ocurre es que Google conoce que en una carretera en concreto en una serie de horas tendrá un flujo en concreto de vehículos.

Solo tienes que pensar en una zona comercial de las afueras y en cómo va a variar el tráfico: elevado los fines de semana y con picos cuando se abran y cierren las tiendas.

Combinar dicha información con las condiciones de tráfico que haya en vivo, así como el aprendizaje automático, puede que genere una serie de predicciones sobre cómo va a evolucionar el estado de la carretera.

Google lo que ha hecho es explicar que con la avanzada tecnología de IA que tiene Alphabet, así como su colaboración con DeepMind, lo que ocurre es que se pueden calcular los datos con el tiempo estimado para la llegada de tal forma que se conoce la evolución de una precisión que es mayor del 97%.

Además, conviene no olvidar que la acumulación de unas métricas históricas con el paso del tiempo van a permitir que se siga depurando la técnica, aunque también hay que contar con el cambio de patrones como ocurrió en los primeros tiempos del COVID, lo que ha pasado a ser todo un desafío para que se prioricen los patrones.

Google, además de conocer de qué forma es el tráfico en la vía en la vida diaria, también sabe cómo es, si existe asfalto o no, la anchura, el trazado, los hitos por lo que pasa, etc.

Hablamos de una serie de datos de gran importancia para ofrecer rutas alternativas.

No solo hablamos de que sea que la vía nos lleve del punto A al B, también de la misma calidad que tenga dicha carretera.  Una vez dicho todo esto, es posible que sea más eficiente estar esperando una serie de minutos más en la autopista, aunque exista una retención y se tome que tomar una carretera secundaria que se encuentre despejada.

Google usa su avanzada tecnología

Por último, Google va a tirar de la información que proporciona por las diversas administraciones, caso de los datos oficiales en cuanto a velocidad, los peajes, las carreteras restringidas o los carriles que se encuentran cerrados por obras.

Al igual que ocurre con Waze, Google lo que considera es que tiene en cuenta los comentarios en tiempo real que hacen los usuarios, caso de que haya accidentes, coches que estén detenidos, etc.

Los datos de carácter administrativo y de los usuarios valen para poder matizar y saber los cambios inesperados que se producen en las carreteras, como pueden ser los deslizamientos que tierra o que haya hielo en la calzada.

Así que ya sabes, esperamos haberte aclarado todo lo máximo posible.