Lotus 3-Eleven: te dejará la boca seca
Cuando un coche nos gusta mucho, generalmente decimos que se te hará la boca agua. Pero con este nuevo Lotus 3-Eleven va a suceder justo lo contrario. Es lo que tienen los descapotables que carecen de luna delantera. Y si no que se lo pregunten a los poseedores de un KTM X-Bow. Por mucho casco que te pongas, lo primero que querrás nada más bajarte de este tipo de coches será un buen vaso de agua.
Lotus 3-Eleven
Lotus ha presentado en el Festival de la Velocidad de Goodwood el nuevo Lotus 3-Eleven, un deportivo en toda regla que se comercializará en 2016 y del que solamente se fabricarán 311 unidades. Algunas de ellas estarán solamente homologadas para rodar en circuito, pero otras contarán con todos los papeles en regla para que puedas lucirlo por la calle. Se trata de un vehículo muy similar a una barqueta de competición donde se ha apostado por el aluminio para su construcción, por lo que la ligereza es una de sus claves. De hecho, la versión de competición no llega a los 900 kilogramos.
Lotus 3-Eleven
El motor que Lotus ha montado en el nuevo 3-Eleven es un V6 de 3,5 litros con turbo que alcanza 457 CV, potencia que se transmite toda al tren trasero. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en poco más de tres segundos y de alcanzar una velocidad punta de 290 km/h. La caja de cambios varía según elijamos la versión de calle, que cuenta con una transmisión manual de 6 velocidades, o la de circuitos, que dispone de un cambio secuencial, también de 6 relaciones. Ambas versiones equipan el mismo sistema de frenado, firmado por AP y con cuatro discos ventilados de 332 mm.
KTM X-Bow
El Lotus 3-Eleven nos recuerda inmediatamente a la auténtica referencia en este tipo de vehículos, el KTM X-Bow. Se trata de un coche construido por y para el disfrute, y que a pesar de contar con tecnología más propia de la competición, es matriculable. Existen varias versiones a la venta, aunque la básica dispone de un motor TFSI de Audi con 220 CV. Con un peso de tan solo 700 kilogramos, te podrás imaginar que las prestaciones del X-Bow son de infarto. Homologa, de hecho, una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 3,9 segundos.
KTM X-Bow
Más allá de su rendimiento en circuito, el KTM X-Bow está pensado para ofrecer a quien lo conduzca la experiencia más pura posible al volante. Por eso se ha apostado por tecnologías más propias del mundo de la competición. No dispone de ningún tipo de asistencia electrónica, cuenta con ruedas independientes como si de un monoplaza se tratase y ha prescindido de cualquier elemento pensado para el confort de los ocupantes. De esta forma, se convierte en la experiencia más próxima a un ‘Fórmula’ que uno puede tener en la calle… hasta que ha llegado el Lotus 3-Eleven y se ha ‘sumado a la fiesta’.
