Imitar a los de Fast & Furious no es buena idea…
Mira que al final de la película de Fast & Furious 7 advierten de que todas las escenas de acción con coches han sido grabadas por especialistas en entornos seguros, y que éstas no deben intentar ser reproducidas por nadie bajo ninguna circunstancia. Pues bien, ya sea por la atracción que provoca lo prohibido, o simplemente porque en el mundo hay gente a la que se le ‘pela el cable’ con frecuencia, de vez en cuando tenemos historias como la que hoy nos ocupa, y que pasamos a contaros…
Fast & Furious 7, en China y tan real como la vida
Fast & Furious 7 está batiendo récords de taquilla en todo el mundo. Y, especialmente, en China. Hasta aquí todo normal. El problema viene cuando en el país asiático se está poniendo de moda que los hijos de las personas más pudientes del país cojan como costumbre el tomar prestados los coches de alta gama de sus padres para emular las andanzas de Toretto y compañía.
La alarma saltó hace pocas fechas, y es que coincidiendo justo con el estreno de la famosa película en China se produjo un brutal accidente de tráfico entre un Lamborghini y un Ferrari en un túnel cercano a Pekín. Al volante de ambas bestias del asfalto, dos jóvenes de unos 20 años.
Fast & Furious 7, en China y tan real como la vida
Una vez comenzaron las investigaciones, se supo que tanto el Lamborghini como el Ferrari circulaban a una velocidad de unos 160 km/h por el túnel donde se produjo el siniestro. Además, según testigos del accidente, estos no eran los únicos coches de lujo que circulaban por esta zona de las inmediaciones de Pekín en esos momentos. De hecho, hay quien afirma que las carreras ilegales por esa zona son una práctica común, especialmente desde el estreno de la séptima entrega de la famosa saga de Fast & Furious.
¿Quiénes causaron el accidente?
Después de múltiples especulaciones, las autoridades chinas lograron identificar a los conductores de los dos deportivos. En uno de ellos iba al volante el hijo de una alta directiva de una empresa petrolera china, mientras que en el otro viajaba un joven que recientemente había amasado una gran cantidad de dinero gracias a sus operaciones en bolsa.
No se trata, como decíamos antes, del primer accidente de este tipo en China. Hace unos años, por ejemplo, el hijo de uno de los cargos políticos más importantes del país perdió la vida a los 23 años al sufrir un accidente a los mandos de un Ferrari.
El Salón de Shanghai, una referencia
Esta creciente obsesión por los coches de lujo entre los jóvenes chinos, que en su mayoría no se pueden permitir, está haciendo que el Salón de Shanghai, del que el otro día te mostramos los 10 mejores modelos, esté siendo un éxito rotundo. La muestra china cumple ya su decimosexta edición, y se establece como una de las ferias automovilísticas de referencia en todo el mundo.