El automóvil avisa de que las multas de Bruselas por el CO2 dispararán el precio de los coches en 2025
En 2025, la patronal de los distribuidores no prevé un repunte de las ventas de coches electrificados
El sector del automóvil avisa de que el precio de los coches de combustión se disparará en 2025 ante la entrada en vigor del endurecimiento de los objetivos de emisiones de CO2. La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) ha insistido en el impacto negativo que puede tener las normas de Bruselas en las empresas automovilísticas y ha pedido una reconsideración de las mismas a la Unión Europea (UE).
Así lo ha señalado la patronal de los distribuidores, en un encuentro con los medios de comunicación en el que Gerardo Cabañas, presidente interino de Ganvam, ha explicado que bajar las emisiones de CO2 a 93,6 gramos de CO₂ por kilómetro provocará un encarecimiento de los coches por las multas que tendrán que asumir los fabricantes si no cumplen con los objetivos de Bruselas, así como por el traslado al consumidor del sobrecoste de la paralización de las ventas de coches de combustión en el mercado.
Multas a los coches de combustión
Un incremento de precios al que habría que sumar el que se produjo por los efectos derivados de la pandemia y la crisis de los semiconductores en el sector, que provocaron que los consumidores pagarán los coches un 30% más caros si lo comparamos con el año previo al estallido de las citadas crisis.
En 2025, la patronal de los distribuidores no prevé un repunte de las ventas de coches electrificados, ya que calculan que este tipo de tecnologías ni si quieran alcanzarán el 13% del total del mercado. Unas cifras con las que los fabricantes se verán obligados a pagar multas de 95 euros por gramo y coche incumplido, que podrían alcanzar sanciones por valor de 15.000 millones de euros en el Viejo Continente.
Previsiones 2024
En el mercado total, Ganvam prevé un crecimiento positivo de las matriculaciones para este año hasta cerrar sobre las 1.026.967 unidades, lo que se traduce en un incremento cercano al 10% en comparación con el mismo periodo del año anterior. No sólo eso, esta cifra supone superar la barrera del millón de unidades por primera vez desde 2019.
Un incremento de las operaciones comerciales que no se repetiría en 2025 por la reducción de la oferta de motores de combustión en el mercado derivada de las sanciones de la Comisión Europea (CE) y que podrían volver a dejar al mercado español por debajo del millón de operaciones comerciales.
Por canales, la patronal asegura que serán las empresas las encargadas de «tirar del carro» con una previsión de crecimiento de la demanda del 3%, hasta las 382.000 unidades, seguidas de los particulares cuya demanda se estima que repuntará un 2,4% hasta las 462.000 unidades y las flotas que comercializarán 183.000 vehículos (+1,7%).
Sin embargo, en el caso de los electrificados y de cara a cierre de ejercicio, las previsiones contemplan una caída de la cuota de mercado hasta el 11% reduciendo su peso final en el mix de ventas, cuyo control mantendrán los vehículos de gasolina y diésel.
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