La Reina Letizia fusiona Oriente y el romanticismo en Zaragoza gracias a un diseño reciclado

El mes de febrero está a punto de terminar, y sin embargo, los Reyes siguen haciendo frente a su agenda oficial como de costumbre. En esta última ocasión, Don Felipe y Doña Letizia han dado pistoletazo de salida a una nueva semana ajetreada al viajar a Zaragoza, donde han presidido el acto de entrega de los Premios Nacionales de Cultura 2021 con el único objetivo de expresar el reconocimiento de la sociedad por la contribución al enriquecimiento del Patrimonio Cultural de España.

Ha sido en torno a las 18:00 horas de la tarde cuando Sus Majestades se han dejado ver en el Edificio Pignatelli en un evento organizado por el Ministerio de Cultura y Deporte que tiene el propósito de fomentar las actividades culturales para favorecer los servicios a los ciudadanos. Una cita cargada de significado para la que la consorte ha vuelto a hacer gala de su exquisito gusto estilístico al enfundarse en un atrevidísimo vestido romántico de la firma Temperley London en color rosa empolvado y con flores bordadas en negro, estrellas, base de tul, media magna y transparencias en la parte superior. Un diseño por el que no se había decantado nuevamente desde que lo estrenó en 2019 para acudir a una cena de gala en Corea y que, sin embargo, favorece considerablemente a la consorte, que lo ha combinado con cartera y salones de Magrit a tono y melena suelta y desenfadada.

Son nada más y nada menos que 31 premios los que se han otorgado a profesionales de un sinfín de esferas, entre las que estaba en primer lugar la de las Bellas Artes conteniendo ámbitos como el del cine o la fotografía. Por otro lado también estaba la categoría de la literatura ya sea a través de obras o de traducciones por parte de los premiados. En tercera posición ha estado presente la categoría de las artes escénicas y la música tanto a través de interpretaciones como de autorías; y por último la de la tauromaquia, en la cual el único condecorado ha sido Morante de la Puebla por «su compromiso con la tauromaquia» y por «la singular personalidad creativa de un artista que recrea y renueva el toreo clásico», entre otras cualidades.

De esta manera, el soberano y su esposa han iniciado una nueva semana repleta de trabajo, en la cual tendrán que hacer frente, como de costumbre, a una serie de actos propios de su cargo dentro de la Familia Real. No obstante, no será hasta el próximo jueves, 23 de febrero, cuando vuelvan a aparecer de manera conjunta para inaugurar la 42ª edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo en IFEMA de Madrid, día con el que Doña Letizia pondrá punto final a sus quehaceres semanales. Cabe destacar también la impecable labor de la Reina Sofía en primera línea de la Familia Real ya que, mientras que su hijo y su nuera han estado en Zaragoza, ella ha acudido a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando para hacer entrega de los Premios Iberoamericanos del Mecenazgo de la Fundación Callia.